El Real Madrid busca su título más deseado ante un Zaragoza victimista pero con la moral crecida

L D (EFE) Carlos Queiroz, entrenador del Real Madrid, lo tiene claro. El capitán y Figo han superado las molestias de última hora y serán titulares. Quien no jugará será Ronaldo, lesionado con una rotura muscular en la pierna derecha.

La alineación del equipo blanco, que actuará de local, está clara y será la habitual en los últimos meses. Sólo la presencia de César en la portería en detrimento de Casillas rompe la monotonía en el once. César ha disputado toda la competición salvo la eliminatoria ante el Éibar, por la lesión que sufrió en el dramático encuentro en Leganés donde el Real Madrid pasó tras la prórroga. Así, Raúl Bravo y Helguera jugarán en el centro de la defensa con Míchel Salgado y Roberto Carlos en los laterales; el inglés David Beckham y Guti formarán en el medio centro, Solari por la izquierda, Zidane de media punta, Figo por la derecha y en punta Raúl.

El recuerdo del Centenariazo

Si hay un título que hace especial ilusión en el vestuario madridista es la Copa del Rey. Once son muchos años sin llevarse este título a la boca. Jugadores como Raúl, Casillas, Roberto Carlos, Helguera o Zidane desean por encima de todo ganar el trofeo. Mención especial para Santiago Solari, que perdió dos finales con el Atlético de Madrid y otra con el Real Madrid en 2002 contra el Deportivo de la Coruña. También será el partido muy especial para Florentino Pérez, el presidente blanco. Desde el palco del Bernabéu vivió el denominado Centenariazo, cuando fueron derrotados 1-2. Por eso, el máximo dirigente blanco la tiene entre ceja y ceja.

20.000 seguidores viajarán desde Madrid apoyando al equipo a los que se sumarán los de peñas madridistas de Barcelona. El equipo viajará en avión a partir de las siete de la tarde y no se entrenará en el Estadio Olímpico antes del encuentro. Queiroz ha convocado a toda la plantilla incluidos los lesionados.

La condición de víctima del Zaragoza

El Real Zaragoza se ampara en la condición de víctima, que medios de comunicación y aficionados parecen otorgarle para la final de la Copa del Rey, para intentar sorprender al conjunto blanco y alzar su sexto trofeo de este torneo. El ejemplo al que se aferran los jugadores del conjunto aragonés está todavía fresco en la memoria, la Copa del año 2001 en la que el Zaragoza igualmente partía con el cartel de perdedor, pues venía de mantenerse a duras penas, mientras que su rival, el Celta había realizado una excelente temporada.

Este se puede decir que es el libro de cabecera del equipo de Víctor Muñoz, que es consciente de su teórica inferioridad pero que sabe que tiene la ventaja de no ir de favorito ni la presión que eso conlleva. "Disfrutar", junto a "concentración", son las palabras más repetidas por los zaragocistas antes de una final que al equipo aragonés le llega en su mejor momento. Sin embargo, tampoco hay que olvidar que el Zaragoza está viviendo una temporada en la que está sufriendo mucho para alejarse de la zona peligrosa de la clasificación en la que ha estado inmerso bastantes jornadas. Los pupilos de Víctor Muñoz llevan cuatro jornadas sin perder, en las que han sumado diez de doce puntos posibles, y la imagen que han mostrado ha mejorado notablemente en los últimos encuentros.

En el conjunto maño solo parece haber una duda para confeccionar el equipo que saltará de inicio al estadio Lluis Companys y es quién ocupará la banda derecha en el centro del campo, si el jugador de la cantera Rubén Gracia "Cani" o el argentino Luciano Martín Galletti. Víctor Muñoz hará salir a uno de estos dos hombres del equipo titular en beneficio del brasileño Savio, que retornará al equipo inicial después de haber jugado el pasado sábado la segunda parte del partido contra el Real Madrid.