L D (EFE) El Real Madrid, segundo a dos puntos del líder de la Liga, el Valencia, se concentrará en La Manga hasta un día antes al enfrentamiento contra el eterno rival, tras el entrenamiento a puerta cerrada que se producirá a las once de la mañana en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas.
La expedición se alojará en el Hotel Hyatt de Murcia, complejo que cuenta con grandes instalaciones deportivas y ocho campos de fútbol para que el Real Madrid pueda entrenarse.
"Para vosotros putas y dinero"
Y es que la sesión de entrenamiento del Real Madrid tras contundente derrota en el Santiago Bernabéu ante el Osasuna no ha podido ser más accidentada. Además de los insultos, han caído lesionados con dos fuertes golpes Solari y Figo, que se unen a las dudas de Iván Helguera y Roberto Carlos y la baja segura de Ronaldo para el partido contra el Atlético, el sábado en el Vicente Calderón.
El día comenzaba con la reunión que sobre el terreno de juego tuvieron durante diez minutos Carlos Queiroz con toda la plantilla, charla en la que se analizaron los últimos reveses del equipo que, tras perder la Copa del Rey, le ha llevado a caer eliminado en la Liga de Campeones y perder el liderato en el campeonato español. A su conclusión el clima se puso tenso cuando tras una portería se colgó una pancarta ofensiva ("Para vosotros putas y dinero; para nosotros indignación y represión") y sus creadores increparon a los jugadores llamándoles "mercenarios, vividores y sinvergüenzas". Veinte minutos tardó en intervenir la policía municipal de Las Rozas que retiró la pancarta y devolvió la tranquilidad.
Con Ronaldo descartado para el sábado por una rotura muscular, los médicos del Real Madrid han trabajado con Helguera y Roberto Carlos. El cántabro sigue el proceso de recuperación de la parameniscitis que sufre en la rodilla derecha y Roberto Carlos sufre una contusión en el primer dedo del pie que le hizo abandonar la zona mixta camino de la sala de prensa con una sintomática cojera. El objetivo de los doctores es recuperar a ambos para la visita del próximo sábado al estadio Vicente Calderón.
El resto de jugadores ha completado junto a Valter di Salvo una parte física del entrenamiento, con carrera continua y cambios de velocidad, antes de ponerse bajo las órdenes de Queiroz para la disputa de pequeños partidos. Fueron tan sólo unos instantes en los que el técnico portugués realizó una prueba novedosa. Fue la inclusión de un tercer central. Junto a Álvaro Mejía y Raúl Bravo, probó con Francisco Pavón, y aunque faltan días para que se decida, la ausencia de Ronaldo en el Calderón puede variar el sistema por primera vez en la temporada, para jugar con defensa de cinco y dar un cariz más ofensivo a dos laterales de largo recorrido como Roberto Carlos y Míchel Salgado.
El día comenzaba con la reunión que sobre el terreno de juego tuvieron durante diez minutos Carlos Queiroz con toda la plantilla, charla en la que se analizaron los últimos reveses del equipo que, tras perder la Copa del Rey, le ha llevado a caer eliminado en la Liga de Campeones y perder el liderato en el campeonato español. A su conclusión el clima se puso tenso cuando tras una portería se colgó una pancarta ofensiva ("Para vosotros putas y dinero; para nosotros indignación y represión") y sus creadores increparon a los jugadores llamándoles "mercenarios, vividores y sinvergüenzas". Veinte minutos tardó en intervenir la policía municipal de Las Rozas que retiró la pancarta y devolvió la tranquilidad.
Con Ronaldo descartado para el sábado por una rotura muscular, los médicos del Real Madrid han trabajado con Helguera y Roberto Carlos. El cántabro sigue el proceso de recuperación de la parameniscitis que sufre en la rodilla derecha y Roberto Carlos sufre una contusión en el primer dedo del pie que le hizo abandonar la zona mixta camino de la sala de prensa con una sintomática cojera. El objetivo de los doctores es recuperar a ambos para la visita del próximo sábado al estadio Vicente Calderón.
El resto de jugadores ha completado junto a Valter di Salvo una parte física del entrenamiento, con carrera continua y cambios de velocidad, antes de ponerse bajo las órdenes de Queiroz para la disputa de pequeños partidos. Fueron tan sólo unos instantes en los que el técnico portugués realizó una prueba novedosa. Fue la inclusión de un tercer central. Junto a Álvaro Mejía y Raúl Bravo, probó con Francisco Pavón, y aunque faltan días para que se decida, la ausencia de Ronaldo en el Calderón puede variar el sistema por primera vez en la temporada, para jugar con defensa de cinco y dar un cariz más ofensivo a dos laterales de largo recorrido como Roberto Carlos y Míchel Salgado.
Pique entre Raúl y Míchel Salgado
En los partidos llegaron dos incidentes más. Primero fue Santiago Solari quien se retiró con un fuerte golpe en la tibia y posteriormente cuando la sesión tocaba a su fin, Luis Figo recibió una fuerte entrada involuntaria de Francisco Pavón que también lo llevó al vestuario antes de tiempo. El portugués recibió masaje para recuperarse de la fuerte contusión que sufrió, lo que le impidió estar presente en una conferencia que se desarrollaba en la misma Ciudad del Fútbol llamada "Objetivo Lisboa".
Además, un claro síntoma del sentimiento enrabietado que tiene la plantilla madridista lo reflejó el pique entre Michel Salgado y Raúl González, en el que hasta tuvo que intervenir Carlos Queiroz. Todo quedó en el campo y los dos jugadores salieron juntos del terreno de juego de forma amigable.
En los partidos llegaron dos incidentes más. Primero fue Santiago Solari quien se retiró con un fuerte golpe en la tibia y posteriormente cuando la sesión tocaba a su fin, Luis Figo recibió una fuerte entrada involuntaria de Francisco Pavón que también lo llevó al vestuario antes de tiempo. El portugués recibió masaje para recuperarse de la fuerte contusión que sufrió, lo que le impidió estar presente en una conferencia que se desarrollaba en la misma Ciudad del Fútbol llamada "Objetivo Lisboa".
Además, un claro síntoma del sentimiento enrabietado que tiene la plantilla madridista lo reflejó el pique entre Michel Salgado y Raúl González, en el que hasta tuvo que intervenir Carlos Queiroz. Todo quedó en el campo y los dos jugadores salieron juntos del terreno de juego de forma amigable.