(Libertad Digital) El recién estrenado ministro de Trabajo lamentó la situación de "precariedad" del mercado laboral español y anunció la intención de los socialistas de acabar con el uso excesivo de los contratos temporales y la rotación en el empleo.
Para ello, Jesús Caldera afirmó que se reforzará el principio de causalidad, es decir, se intentará ligar el contrato temporal a trabajo también temporal, se perseguirá el encadenamiento de contratos temporales y se estimularán los contratos a tiempo parcial fijos y el fijo discontinuo. Según dijo, los objetivos del nuevo Gobierno pasan por estimular la contratación a tiempo parcial e indefinida, a través de las bonificaciones, e incrementar el coste efectivo de los contratos temporales.
Durante su intervención, el titular de Trabajo respondió a las peticiones del secretario general de CCOO, José María Fidalgo, comprometiéndose a no llevar a cabo reformas "por decreto" o "imposición" y sin el acuerdo y respaldo de los agentes sociales. Nada más hacer público este compromiso, el presidente de la CEOE, José María Cuevas, se mostraba contrario a la primera propuesta realizada por Caldera para reducir la temporalidad.
Tras la primera reunión de la Junta Directiva de la patronal CEOE después las elecciones del 14-M, Cuevas afirmaba que para reducir la precariedad laboral "habría que estudiar más las causas" y adoptar medidas que la rebajen, pero sin reducir el empleo total. A pesar de no estar de acuerdo con esta propuesta de Caldera, Cuevas mostraba la misma disposición de siempre a negociar tanto con el Gobierno como con los sindicatos y agradecía su ofrecimiento de diálogo.
Otras promesas de Caldera
Según informa la agencia Efe, Caldera se refirió también durante su intervención a la evolución de la Seguridad Social y las pensiones y alertó de los cambios de la sociedad en los últimos años, marcados por cambios demográficos, masiva incorporación de la mujer al trabajo y envejecimiento de la población. En este sentido, reiteró que el Gobierno, apoyado en el Pacto de Toledo, acometerá las reformas que sean necesarias para garantizar el futuro del sistema de Seguridad Social y su estabilidad, sin olvidar una mejora de las pensiones mínimas o las de viudedad.