L D (EFE) Los agentes se personaron en una vivienda de la calle Prim alertados por los vecinos, quienes aseguraban que se estaba produciendo una gran escándalo en un piso y que se oían gritos de socorro de una mujer.
Una vez allí, el detenido y un familiar negaron los hechos, pero los policía locales entraron en el domicilio y localizaron a una mujer, de 31 años, que presentaba contusiones por todo el cuerpo. La víctima relató a los agentes que las palizas se sucedían desde que empezó su relación con el arrestado hace un año.
Una vez allí, el detenido y un familiar negaron los hechos, pero los policía locales entraron en el domicilio y localizaron a una mujer, de 31 años, que presentaba contusiones por todo el cuerpo. La víctima relató a los agentes que las palizas se sucedían desde que empezó su relación con el arrestado hace un año.
Según informó la Jefatura, la mujer pidió a su marido, al que denunció por malos tratos y que ya había incumplido la orden de alejamiento anteriormente, que abandonara la vivienda y llamó a la policía, que tras personarse en el lugar procedió a la detención del hombre. Hace dos días, el detenido se aproximó a la vivienda familiar, donde aporreó la puerta exigiendo que le abrieran, lo que no ocurrió, por lo que abandonó el lugar.
La víctima se encuentra dentro del programa de protección de las UPAP (Unidades policiales de Prevención , Asistencia y Protección), mientras que José J.B. ya había sido arrestado en siete ocasiones por quebrantar la orden de alejamiento, atentado a agente de la autoridad, insultos y amenazas, o desacato, entre otros delitos.