"Desde hace algún tiempo, vengo observando cómo suele utilizar Vd. a Ceuta y a Melilla para establecer comparaciones, en las que siempre se percibe un cierto tono peyorativo con respecto a ambas ciudades.
En ese sentido, deseo aclararle que tanto Ceuta como Melilla, al igual que Cataluña, forman parte de España, es decir, de la patria común e indivisible consagrada por la Constitución que, le guste o le disguste, nos dimos todos los españoles -catalanes, ceutíes y melillenses incluidos- en el año 1978.
Melilla y Ceuta no solamente tienen tras de sí una historia multisecular llena de episodios heroicos en defensa de su incuestionable españolidad (a veces con la apreciada ayuda de voluntarios catalanes, como sucedió en la guerra de 1860), sino que también cuentan con unas poblaciones en ellas arraigadas, cuyos antepasados están sepultados en sus cementerios y a cuyos hijos les asiste el derecho de construir su futuro en las tierras donde nacieron, siempre bajo la bandera que, desde hace tanto tiempo, ondea en las dos ciudades.
Deseo que comprenda, Sr. Carod-Rovira, que sus reiteradas e innecesarias alusiones resultan hirientes tanto para los ceutíes y melillenses de nacimiento como para numerosísimos compatriotas, entre los que me consta que se cuentan muchos catalanes, que aprecian y valoran sinceramente a estas ciudades.
Porque Melilla y Ceuta merecen ser respetadas, le ruego que, de ahora en adelante, se abstenga de utilizarlas en la forma en que viene haciéndolo. Es más, le invito a que profundice en el conocimiento de nuestra realidad, raíces, tradiciones y aspiraciones, tras lo cual encontrará a un pueblo, hospitalario y abierto, que, soportado por una profunda historia, desea un futuro de progreso en el seno común de España
Atentamente,
Juan J. Vivas Lara.
Presidente de la Ciudad Autónoma de Ceuta".