El consejero de Presidencia anunció que el Gobierno andaluz "va a pelear, y estamos seguros que lo vamos a conseguir, para que la solidaridad y la cohesión sean los elementos fundamentales del sistema de financiación" sin perder de vista "los elementos que nos diferencian" a unas comunidades autónomas de otras.
Zarrías añadió que el primer objetivo "fundamental y prioritario" que se ha marcado la Junta es liquidar el sistema de financiación vigente entre 1997 y 2001, por el que Andalucía recibirá del Estado unos 2.500 millones de euros. Una vez que se cierre este aspecto, "Andalucía no tendría ningún inconveniente en sentarse, siempre de una forma multilateral, con todas las comunidades autónomas, en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, para poder hablar de todo lo que haya que hablar, incluido cualquier modificación al sistema de financiación".
Después de estas claras advertencias, el consejero de Presidencia recordó que el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, está haciendo lo que el anterior Gobierno no hizo, que es "reunirse con todos los presidentes de las comunidades autónomas, al margen de su color político", para abordar el sistema de financiación, al igual que lo hará en una reunión prevista para finales de mayo con el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves.