L D (EFE) Ankara recibía este lunes, por primera vez en 16 años, a un jefe de Gobierno británico. Blair se reunió con el presidente turco, Ahmet Necet Sezer, y el primer ministro, Recep Tayyip Erdogan. En la rueda de prensa que ofreció junto a éste, Blair aseguró que su país "apoya la integración de Turquía en la Unión Europea", y anunció que el Gabinete Erdogan podría comenzar las conversaciones con los países miembros el próximo diciembre. Asimismo, afirmó que Londres trabajará para poner fin al aislamiento de los turco-chipriotas, que votaron mayoritariamente a favor del plan de la ONU para la reunificación de Chipre en el referéndum que se celebró en la isla a finales del pasado abril.
Por lo que respecta a Irak, Blair aseguró que los soldados británicos no se marcharán hasta que concluyan su misión. "El asesinato de hoy –afirmó– nos ha revelado que la salida de Irak no será rápida. Continuaremos allí hasta que el trabajo esté completamente hecho".
Por su parte, Erdogan dijo que el envío de tropas a aquel país no está en la agenda de su Gobierno. "Turquía decidió mandar tropas a Irak, pero esta medida no fue apoyada por el pueblo iraquí. Entonces comenzamos a enviar ayuda humanitaria bajo el paraguas de la UE, y continuaremos haciéndolo", declaró.
Turquía extremó las medidas de seguridad en Ankara y sus alrededores ante la visita Tony Blair. Pese a todo, cuatro artefactos de escasa potencia estallaron, en la madrugada del domingo al lunes, en las sucursales que el banco británico HSBC tiene en Ankara y Estambul.
Por lo que respecta a Irak, Blair aseguró que los soldados británicos no se marcharán hasta que concluyan su misión. "El asesinato de hoy –afirmó– nos ha revelado que la salida de Irak no será rápida. Continuaremos allí hasta que el trabajo esté completamente hecho".
Por su parte, Erdogan dijo que el envío de tropas a aquel país no está en la agenda de su Gobierno. "Turquía decidió mandar tropas a Irak, pero esta medida no fue apoyada por el pueblo iraquí. Entonces comenzamos a enviar ayuda humanitaria bajo el paraguas de la UE, y continuaremos haciéndolo", declaró.
Turquía extremó las medidas de seguridad en Ankara y sus alrededores ante la visita Tony Blair. Pese a todo, cuatro artefactos de escasa potencia estallaron, en la madrugada del domingo al lunes, en las sucursales que el banco británico HSBC tiene en Ankara y Estambul.