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Alonso niega que la operación de Avilés sea fruto de intervenciones telefónicas anteriores al 11-M

El ministro del Interior ha comparecido en rueda de prensa para explicar la operación de la Guardia Civil que se ha saldado con seis detenciones en la localidad asturiana de Avilés. Escudándose una decena de veces en el secreto de sumario y el respeto a la investigación, Alonso sólo aportó un dato: las detenciones "no son consecuencia en ningún modo de intervenciones telefónicas practicadas antes del 11 de marzo".

El ministro del Interior ha comparecido en rueda de prensa para explicar la operación de la Guardia Civil que se ha saldado con seis detenciones en la localidad asturiana de Avilés. Escudándose una decena de veces en el secreto de sumario y el respeto a la investigación, Alonso sólo aportó un dato: las detenciones "no son consecuencia en ningún modo de intervenciones telefónicas practicadas antes del 11 de marzo".
(Libertad Digital) El ministro del Interior, José Antonio Alonso, compareció este miércoles en rueda de prensa para informar sobre la operación de la Guardia Civil en la localidad asturiana de Avilés. No ofreció apenas. Eso sí, la única novedad la aportó sin ser preguntado por ello. Según el ministro, no hubo "en modo alguno" intervenciones telefónicas anteriores al 11 de marzo como apuntaban algunas agencias de información.
 
Alonso explicó que la operación está relacionada con una orden del Juzgado Central de Instrucción. Tras el matiz, recordó –lo haría hasta una decena de veces durante su intervención– que todo lo que tenía que decir a la prensa tenía el límite del respeto al secreto sumarial que se ha abierto y al respeto a la investigación policial. Por tanto, explicó Alonso, "no ofreceremos datos operativos que pongan en peligro la investigación". Recordó que los detenidos son todos españoles y están relacionados "con la trama" de adquisición de los explosivos que se utilizaron el 11-M. Emilio Llano, añadió, era vigilante de la mina "encargado de la recepción y almacenamiento".
 
Los periodistas le preguntaron por los antecedentes de estas personas, si habían sido vigiladas con anterioridad y si al aludir a una "trama" se suponía una participación directa de los detenidos en los atentados. Alonso matizó que decía "trama" para referirse a "grupo de personas". Esta expresión fue la que repitió en el resto de respuestas a la prensa.
 
La "altísima importancia" de El Egipcio
 
En cuanto a la detención de El Egipcio, Alonso destacó que es "una persona de una importancia altísima dentro de la estructura de Al Qaeda en Europa y en España". Añadió que "las tramas del 11-M son absolutamente difusas y horizontales". Sobre las palabras del terrorista fruto de la intervención de su teléfono y de las que informó la cadena COPE, Alonso no quiso referirse al hecho de que asegurara haber estado preparando los atentados desde hace "dos años y medio". El ministro abogó por no "establecer hipótesis de trabajo estratégicas". Añadió que "estamos en situación de máxima tensión y alerta". En definitiva, no contestó a la pregunta.
 
La rueda de prensa no fue un ejemplo de trasparencia. En realidad, el único dato que parecía querer trasladar era el de la fecha de inicio de la operación y su procedencia. Otro periodista le preguntó si los detenidos tenían algún vínculo con los terroristas que se suicidaron en Leganés ya que esa la era la orientación que ofrecían las agencias de información –se apunta incluso a que hablaron con ellos por teléfono–. La primera respuesta de Alonso fue "sí, claro". En seguida, rectificó: "Perdón. No, ya he dicho que forman parte del grupo o trama de personas que facilitan los explosivos".

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