(Libertad Digital) El presidente del Gobierno ha comparecido por segunda vez para dar cuenta de las negociaciones que se alcanzaron en Bruselas en las que se dio luz verde a la primera Constitución Europea. El discurso de Zapatero no ha aportado novedades respecto a lo dicho hasta ahora. Lo único destacable es el compromiso de someter a referéndum la ratificación del texto constitucional en España.
Según explicó, la intención del Gobierno es abrir un periodo de consultas con todas las fuerzas políticas para buscar la fecha más conveniente y el texto de la pregunta que se someterá a votación. El presidente reclamó el apoyo de la Cámara para lograr la participación más numerosa posible de los españoles en esa consulta. Según Zapatero, "habrá quien piense que es innecesario acudir a un referéndum. Habrá quien sostenga que es un derroche, habrá quien opine que es una temeridad a la vista de la participación alcanzada en las últimas elecciones. Creo que no debemos desconfiar de nuestro pueblo".
ZP llegó a citar a Alexis de Tocqueville, para decir que "lo que hay que temer para las generaciones futuras no son las revoluciones sino la apatía". En su opinión, "los españoles hemos dado pruebas suficientes en estos últimos veinticinco años de nuestro compromiso y nuestra pasión por nuestra historia colectiva".
Rajoy destaca tres grandes perdedores: “España, Polonia y Zapatero”
En el turno de réplica, el líder de la oposición, Mariano Rajoy reprochóa Zapatero: “Usted no ha hecho nada en Europa pero hay que ver que bien lo vende”. Así se ha dirigido el líder popular para aplacar el inexplicable triunfalismo del que ha hecho gala el presidente socialista Zapatero sobre el poder conseguido por España en el Consejo de Bruselas de la semana pasada donde se aprobó la Constitución Europea.
Mariano Rajoy ha acusado a Zapatero de “renunciar a Niza” por lo que “España ha pasado de estar en la división de honor”a estar “en el grupo de los segundones”. El líder popular ha echado la culpa al presidente socialista de que España, con el reparto de poder contemplado en la Constitución europea, haya perdido poder en Bruselas. “Hemos pasado de representar lo mismo que los grandes”, explicó Rajoy y a representar “la mitad que Alemania y un 50% menos que Francia y Gran Bretaña”. Por este motivo, Rajoy ha declarado que la cumbre de Bruselas terminó con tres grandes perdedores: “España, Polonia y Zapatero”.
El líder del PP le ha dicho al presidente socialista que "cuando se trata de hablar de España soy más ambicioso que usted” y ha recalcado que a España le corresponde algo mejor que lo que ha conseguido Zapatero en la pasada cumbre de Bruselas. Ahora, ha dicho Rajoy, nuestro país tiene “lo que nos han dejado los demás”. Por esta razón, el presidente del PP, tras escuchar a Zapatero, le ha dejado dicho que cuando “usted habla, me viene al recuerdo aquel general que era más recordado por sus memorias que por sus hazañas”. En cuanto a la decisión de someter a referéndum el texto de la Constitución, Rajoy se mostró de acuerdo.
ZP busca la sorpresa en el último momento
En el segundo turno del presidente del Gobierno, tras la intervención del resto de los grupos, Zapatero quiso sorprender a la Cámara exhibiendo un dossier que le había entregado Aznar en el traspaso de poderes.
En este documento, elaborado por la secretaría de la Conferencia Intergubernamental, se afirmaba que el gobierno de Aznar aceptaba la “doble mayoría” en la toma de decisiones del Consejo Europeo y el umbral decisorio de población en un 65 por ciento, justo lo que ha obtenido España en la cumbre de Bruselas, según Rodríguez Zapatero.
Según Zapatero, en esos documentos "se sugiere que España deseaba el 65 por ciento de población como criterio y que España no lo consiguió entonces". En medio del alboroto, Zapatero se dirigió al líder de la oposición: "Le pilla por sorpresa este documento señor Rajoy".
Terminó su turno diciendo a Rajoy que "quizá el problema es que todavía Aznar no ha hecho el traspaso de poderes con usted" porque "el gobierno del PP deseaba llegar a ese umbral".
Aznar nunca aceptó el actual reparto de poder, según Rajoy
El secretario general del PP, Mariano Rajoy, ha negado, en relación a las insinuaciones de Zapatero, que el gobierno de Jose María Aznar aceptara en su día la fórmula de reparto de poder conseguida por el presidente socialista en Bruselas. Rajoy ha dicho que el gobierno popular no lo necesitaba, porque ya tenía el Tratado de Niza, que era "mucho mejor" para España.
En su turno de réplica, Mariano Rajoy ha acusado al presidente socialista de “indicar solamente lo obvio, vender humo y no aportar nada”. El líder popular ha terminado su explicación afirmando que el papel de Zapatero es “irrelevante” y que “España ha perdido peso en Europa” por su culpa.