L D (EFE) Repsol YPF ha comprado a Royal Dutsch-Shell las 303 estaciones de servicio que la petrolera anglo holandesa gestionaba en Portugal por un importe no precisado, ya que está recogido en una cláusula de confidencialidad, informaron fuentes de la petrolera española.
La empresa compradora ha adquirido, asimismo, el 15 por ciento de la compañía logística portuguesa Compañía Logística de Combustibles (CLC) y el acceso a su cartera de contratos de abastecimiento y logística.
Con la compra de la red de estaciones de servicio de Shell en Portugal, Repsol YPF cuadruplica su red en el país vecino y alcanza el número de 417, con una cuota de mercado del 19 por ciento y aumenta en 1,85 millones de metros cúbicos las ventas totales de productos energéticos en Portugal hasta alcanzar un volumen total de 2,5 millones de metros cúbicos.
Asimismo, la petrolera española alcanza la segunda posición en venta directa de productos petrolíferos en Portugal con una cuota de mercado del 21 por ciento. En el contrato de compra venta entre Repsol y Royal Dutch-Shell se excluye el área de negocio de Gas Licuado de Petróleo (GLP) y de lubricantes.
El acuerdo, que se hará efectivo una vez obtenidos los correspondientes permisos de las autoridades, incluye la mayoría de las actividades de Shell en Portugal, tales como la venta directa de combustibles y asfaltos, combustibles marinos y las terminales de almacenamiento de Shell. Para Repsol, la operación con Shell en Portugal responde a una estrategia de crecimiento en mercados naturales como el portugués, que "además su proximidad geográfica, dispone de un alto potencial de crecimiento".
Alfonso Cortina, presidente de Repsol-YPF, expresó su satisfacción porque "la operación conlleva, además, la incorporación a Repsol YPF de profesionales de primer nivel, con gran experiencia y un profundo conocimiento del mercado luso."
Repsol YPF cuenta ya con actividades en 28 países, es una de las diez mayores petroleras privadas del mundo y la mayor compañía privada energética en Latinoamérica en término de activos. Tras la venta de la red de gasolineras de Shell en Portugal queda pendiente el mismo proceso en España que, según la empresa vendedora, puede desagregarse entre las instalaciones en la península y las ubicadas en Canarias.
Repsol tiene vetada la compra de nuevas estaciones de servicio en territorio español hasta el próximo año, tras los plazos que se le impusieron en el decreto de medidas de liberalización económica de junio de 2000, por el que Repsol tenía que rebajar su cuota de mercado en este negocio, por entonces en torno al 75 por ciento.