L D (EFE) La sección segunda de la sala de lo penal de este tribunal revoca una decisión anterior del juez central de vigilancia penitenciaria, Javier Gómez Bermúdez, que rechazó la propuesta de la prisión de conceder ese beneficio al preso etarra al estimar que a los internos condenados por el Código Penal de 1973 no se les puede aplicar el reglamento de 1956 sobre redenciones extraordinarias.
La sala, que recuerda que ya se ha pronunciado "repetidamente" sobre este asunto, reitera la "aplicabilidad" del citado reglamento y afirma que si el Centro Penitenciario ha establecido un baremo para la concesión de redenciones extraordinarias por trabajo "no hay que mostrarse más riguroso", siempre que esos beneficios "obedezcan a criterios objetivos y de común aplicación a los internos".
En el caso de Amantes Arnaiz, el tribunal dice que si llevó a cabo el curso de marroquinería "negar la redención extraordinaria sólo conduce a desmotivar al interno en su proceso de readaptación social". Los magistrados añaden que, si bien el fiscal respaldó la decisión del juez de vigilancia penitenciaria, con anterioridad el ministerio público se había mostrado favorable a la redención extraordinaria.
El etarra Jesús Amantes Arnaiz fue extraditado por Francia en 1996 y condenado en 1997 a 61 años de prisión por su participación el 5 de febrero de 1983 en un atentado contra la sede del Banco de Vizcaya en Bilbao en el que murieron tres personas y otras once resultaron heridas.
La sala, que recuerda que ya se ha pronunciado "repetidamente" sobre este asunto, reitera la "aplicabilidad" del citado reglamento y afirma que si el Centro Penitenciario ha establecido un baremo para la concesión de redenciones extraordinarias por trabajo "no hay que mostrarse más riguroso", siempre que esos beneficios "obedezcan a criterios objetivos y de común aplicación a los internos".
En el caso de Amantes Arnaiz, el tribunal dice que si llevó a cabo el curso de marroquinería "negar la redención extraordinaria sólo conduce a desmotivar al interno en su proceso de readaptación social". Los magistrados añaden que, si bien el fiscal respaldó la decisión del juez de vigilancia penitenciaria, con anterioridad el ministerio público se había mostrado favorable a la redención extraordinaria.
El etarra Jesús Amantes Arnaiz fue extraditado por Francia en 1996 y condenado en 1997 a 61 años de prisión por su participación el 5 de febrero de 1983 en un atentado contra la sede del Banco de Vizcaya en Bilbao en el que murieron tres personas y otras once resultaron heridas.