L D (EFE) El jefe del Estado hizo estas declaraciones tras reunirse con líderes tribales de la región de Al Anbar, en el corazón del denominado Triángulo Suní, uno de los bastiones de los grupos terroristas que operan en Irak.
En los últimos tres meses los mencionados grupos han secuestrado a más de 60 extranjeros, y generalmente han exigido para devolverles la libertad que sus países o las empresas para las que trabajan suspendan sus actividades en Irak.
El Gobierno filipino cedió recientemente al chantaje y retiró los efectivos militares que mantenía desplegados en Irak. Asimismo, la compañía para la que trabajan los dos camioneros de nacionalidad jordana que permanecen secuestrados por las Brigadas de los Muyahidin desde el lunes ha anunciado la suspensión de sus labores en el país.
Por otro lado, Pervez Musharraf ha solicitado la liberación de los dos paquistaníes que mantiene cautivos desde el viernes el grupo terrorista Ejército Islámico de Irak. Ambos son empleados de una empresa constructora de capital kuwaití. El presidente de Pakistán ha señalado que sus compatriotas no tienen vínculos políticos ni trabajan para las tropas de EEUU.
Islamabad, El Cairo y Nairobi piden la liberación de sus ciudadanos
Las mismas razones han esgrimido los Gobiernos de El Cairo y Nairobi, que también tienen ciudadanos en manos de grupos terroristas. "Queremos reiterar que Kenia no tiene tropas desplegadas en Irak, ni observadores, ni compañías, y que no participó en la guerra", declaró este martes el ministro keniata de Asuntos Exteriores, Chirau Ali Mwakwere.
En Bagdad, el líder tribal Hisham al Duleini, que hace de intermediario con algunos de los secuestradores, instó a la empresa kuwaití y a los países de los siete camioneros capturados hace dos semanas que se avengan a negociar.
En otro orden de cosas, la Policía ha anunciado este mismo martes el arresto de ocho ciudadanos iraquíes sospechosos de planear secuestros en la ciudad septentrional de Kirkuk, en conexión con la red que lidera el terrorista jordano Abu Musab al Zarqaui, jefe de Al-Qaeda en Irak.
Las mismas razones han esgrimido los Gobiernos de El Cairo y Nairobi, que también tienen ciudadanos en manos de grupos terroristas. "Queremos reiterar que Kenia no tiene tropas desplegadas en Irak, ni observadores, ni compañías, y que no participó en la guerra", declaró este martes el ministro keniata de Asuntos Exteriores, Chirau Ali Mwakwere.
En Bagdad, el líder tribal Hisham al Duleini, que hace de intermediario con algunos de los secuestradores, instó a la empresa kuwaití y a los países de los siete camioneros capturados hace dos semanas que se avengan a negociar.
En otro orden de cosas, la Policía ha anunciado este mismo martes el arresto de ocho ciudadanos iraquíes sospechosos de planear secuestros en la ciudad septentrional de Kirkuk, en conexión con la red que lidera el terrorista jordano Abu Musab al Zarqaui, jefe de Al-Qaeda en Irak.