LD (EFE) El Gobierno interino iraquí advirtió al clérigo radical chií Muqtada al Sader, de que tiene sólo unas "horas" para ordenar la retirada de sus seguidores de la gran mezquita de Nayaf, y cumplir las demás condiciones. El ministro iraquí de Estado, Kasim Daoud, y el gobernador de Nayaf, Adnam Al Zurfi, indicaron en rueda de prensa conjunta, que Al Sader debe anunciar en persona y públicamente, que está de acuerdo en desarmarse.
Según testigos en la asediada ciudad chií de Nayaf, miembros de la Primera División Expedicionaria de "Marines" se encuentran apostado a escasos doscientos metros de la mezquita del imán Ali Bin Talib, bajo cuya cúpula dorada se encuentran atrincherados los terroristas. Los militares estadounidenses, en posiciones de combate, llegaron precedidos por carros de combate y apoyados con baterías de artillería ahora visibles desde la puerta del templo, el más sagrado para los más de 130 millones de chiíes que hay en el mundo.
Los enfrentamientos tienen lugar horas después de que la Conferencia Nacional, foro que ha reunido a unos 1.300 líderes iraquíes, anunciara que había recibido una carta de Muqtada al Sader en la que aceptaba retirar a sus seguidores de la mezquita del imán Ali Ben Taleb, desarmarlos, y transformar su milicia en una organización política. No obstante, los portavoces de Al Sader precisaron después, que era necesario declarar un alto en fuego para poder cumplir esas tres condiciones.
Entretanto, fuerzas de EEUU atacaron posiciones que el "Ejército Mahdi" tiene en el empobrecido barrio de Al Sader, al noreste de Bagdad, donde viven más de dos millones de iraquíes. En operaciones similares que tuvieron lugar durante la madrugada de este jueves, según fuentes militares, unos cincuenta chiíes murieron por los bombardeos de helicópteros artillados. "El objetivo de estas operaciones es echar a las fuerzas enemigas y retomar el control", señaló el capitán Brian O'Malley, portavoz militar. Las tropas salieron de allí cuando hace unas dos semanas arreciaron los ataques contra las patrullas y los equipos militares que supervisan proyectos de mejora del sistema de distribución de agua potable y energía eléctrica.