L D (EFE) Para Malamud –que trabaja en el Instituto Superior de Ciencias del Trabajo y de la Empresa (ISCTE) de Lisboa–, las empresas españolas "no se aprovecharon especialmente" de la situación económica del país austral, ya que no hicieron otra cosa que no hubieran hecho otros inversores. "Lo que ocurría –explicó– es que la sociedad argentina demandaba un 'enemigo'".
Asimismo, sostuvo que “la inversión que debería hacer” España para establecer su liderazgo en Iberoamérica no se va a desembolsar porque aquélla “no tiene la voluntad”, debido a que “en el pasado no siempre le fue bien”.
Por otra parte, el diario La Nación publica este martes un sondeo que dice que Kirchner goza de una imagen positiva para el 55 por ciento de sus conciudadanos, si bien los que aprueban su gestión son bastantes menos: el 42 por ciento.
Amplio rechazo a la política de seguridad del Gabinete Kirchner
En el estudio –llevado a cabo por la empresa Graciela Rohmer y Asociados en el Gran Buenos Aires– se dice que los puntos débiles de la gestión del peronista son la seguridad y el orden público. Así el 66 por ciento de los encuestados dijo no estar de acuerdo con lo que hace el Ejecutivo para enfrentar la ola de violencia que sacude el país. Además, el 60 por ciento está en desacuerdo con la manera en que se trata el problema de los piqueteros, cuyos desmanes no son dispersados por la fuerza por decisión gubernamental.
También son numerosos (47 por ciento) los encuestados que piensan que no se está haciendo lo correcto ni en materia de creación de empleo ni en la lucha contra los privilegios sectoriales y la corrupción.
El Gabinete obtiene los mejores resultados en política exterior (35 por ciento de respaldo), manejo de las relaciones con el FMI (34 por ciento) y conducción económica (30 por ciento).
Kirchner asumió el poder en mayo de 2003, después de haber obtenido el respaldo de sólo el 22 por ciento de los electores en primera vuelta y de no tener que disputar la segunda, pues su rival, Carlos Menem, se retiró de la carrera por ocupar la Casa Rosada. El Gabinete obtiene los mejores resultados en política exterior (35 por ciento de respaldo), manejo de las relaciones con el FMI (34 por ciento) y conducción económica (30 por ciento).
La imagen del gobernante es "positiva" para un 55 por ciento de los consultados por Graciela Rohmer y Asociados, "regular" para un 28 y "negativa" para un 15, mientras que su gestión es “positiva” para un 42 por ciento, “regular” para un 35 y “negativa” para un 21.