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Argentina presiona a Repsol aumentando los impuestos a la exportación de hidrocarburos

El Gobierno argentino ha anunciado aumentos progresivos y proporcionales de las retenciones a la exportación de hidrocarburos que van del 3 al 20 por ciento, para evitar que los precios internos de los combustibles se disparen al compás del mercado internacional. Esta medida afecta a una treintena de compañías productoras, principalmente a Repsol YPF, que extrae el 43 por ciento del crudo que se produce en el país.

LD (EFE) El ministro de Economía, Roberto Lavagna, ha confirmado en una rueda de prensa una medida que ya había sido adelantada por otros miembros del Gobierno y que en principio afecta sólo al petróleo.

Este incremento de los impuestos, que será publicado este jueves en el Boletín Oficial del Estado, afecta a una treintena de compañías productoras de petróleo que operan en Argentina, principalmente a la hispano-argentina Repsol YPF, que extrae el 43 por ciento del crudo que produce el país, a la anglo-argentina Pan American Energy y a la brasileña Petrobras.

El plan diseñado por el Gobierno establece que si el precio internacional del barril de crudo ligero Texas se sitúa entre 32 y 35 dólares, las retenciones a las exportaciones, que hoy son del 25 por ciento, aumentarán un 3 por ciento. Para un precio de 35 a 37 dólares, el aumento será de un 6 por ciento; entre 37 y 39 dólares, del 9 por ciento; entre 39 y 41 dólares, del 12 por ciento; entre 41 y 43 dólares, del 15 por ciento; y entre 43 y 45 dólares, del 18 por ciento. Si el barril de referencia en América se cotiza por encima de los 45 dólares, la retención del 25 por ciento a las exportaciones se incrementará un 20 por ciento.

El gobierno argentino impuso un gravamen del 20 por ciento a las exportaciones de hidrocarburos tras la devaluación del peso argentino, en enero de 2002, para mantener a raya los precios de los combustibles, pero en mayo pasado elevó ese impuesto al 25 por ciento. Lavagna señaló que cuando se introdujeron las retenciones el barril de crudo costaba 22 dólares, mientras ahora el petróleo cotiza a casi 45 dólares, por lo que consideró que los efectos hubieran sido muy negativos si el gobierno hubiera permitido que el alza de los precios internacionales se trasladase al mercado interno.

El ministro consideró que las petroleras que operan en Argentina no tienen justificación válida para aumentar los precios de las gasolinas, tal como lo hicieron en los últimos días, ya que el alza internacional del precio del crudo no afecta a los costos de producción locales, pues "Argentina es un país netamente exportador, no importador".

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