L D (EFE) El jefe de la Policía de Samarra, Raad Zanzan, dijo a la cadena de televisión Al Yazira que la ciudad está bajo entero control de las tropas estadounidenses, que patrullan por las calles, donde aún no ha aparecido la policía iraquí. Aunque las fuentes estadounidenses dijeron que los 125 muertos son rebeldes, la cadena mostró imágenes de al menos dos niños que eran sacados de los escombros de casas bombardeadas.
Los militares estadounidenses han asegurado que los bombardeos van a continuar, lo que puede significar que aún no han logrado controlar totalmente la ciudad. La ciudad de Samarra había escapado durante meses al control de las autoridades en Irak, y el gobierno iraquí sospechaba que en su interior se escondían grupos insurgentes que utilizaban la ciudad como base para sus ataques contra las tropas extranjeras y las fuerzas de seguridad iraquíes.
El ministro de Estado iraquí para los asuntos de Seguridad, Qasem Daud, aseguró en rueda de prensa que prosiguen las operaciones en la ciudad de Samarra para erradicar el foco terrorista. Estas operaciones, que comenzaron en la medianoche del jueves, han dejado ya 125 muertos, que según Daud son en su totalidad seguidores del antiguo régimen de Sadam Husein, a los que hay que sumar un soldado estadounidense muerto, cuatro más heridos, y dos policías iraquíes también heridos.
Daud dijo además que la operación de "limpieza" de Samarra fue expresamente pedida por los jefes tribales de la región, supuestamente hartos del estado de anarquía en que se encontraba la ciudad, que durante meses ha estado fuera del control de las autoridades iraquíes.
Un comunicado militar estadounidense explicó esta madrugada que el objetivo principal de la ofensiva sobre Samarra había sido justamente recuperar para las autoridades iraquíes los edificios gubernamentales y policiales en la ciudad.