L D (EFE) San Segundo ha respondido en el Pleno del Congreso a una pregunta de Francesc Canet, diputado de Esquerra, quien ha planteado en catalán sobre si hay o no acciones del Ejecutivo para "impedir el reconocimiento internacional" de la Federación Catalana de Patinaje.
Durante el debate, los diputados de ERC exhibieron camisetas de la selección deportiva catalana en sus escaños, lo que motivó que Manuel Marín, les dijera pasados unos minutos que "como me imagino que lo que pretendían es la foto y ya la tienen, por favor retiren la tienda". Posteriormente, los diputados de ERC, a través de un comunicado, se mostraron "dolidos" por las palabras de Marín, ya que su acción ha sido "pacífica, silenciosa, respetuosa y sin interrumpir a nadie" y recordaron que nunca han participado en abucheos, ni discusiones que alterarán el orden del Congreso, "al contrario que los grupos mayoritarios que se abroncan a menudo".
Durante la sesión de control, la ministra recordaba que la postura del Gobierno es de que no hay nada en contra de las selecciones autonómicas y precisó que no ha realizado ninguna gestión sobre patinaje. Canet, ya en castellano, dijo que el Ejecutivo reconoció que las federaciones internacionales tienen carácter de asociaciones sometidas al derecho privado y ha manifestado que no tenía previstas actuaciones para impedir el reconocimiento internacional de la Federación Catalana de Patinaje. En su opinión, "algunos indicios parecen contradecir esta voluntad", ya que la Federación Catalana ha obtenido el reconocimiento oficial provisional, por lo que su selección participa actualmente en el campeonato mundial.
Antes, dijo, tuvo que superar el escollo de una propuesta de exclusión presentada por algunas federaciones y ello coincide con declaraciones del presidente de la federación española de patinaje, "de las que se puede deducir una actitud de claro boicoteo". A su juicio, ello sería contradictorio con el texto aprobado en el Congreso, votado también por el PSOE, que instaba al Gobierno a impulsar la presencia, en competiciones internacionales, de las selecciones deportivas autonómicas". Precisó que la demanda de ese reconocimiento internacional no proviene de las formaciones políticas catalanas, sino de la "inmensa mayoría de la sociedad catalana".
La ministra afirmó el Gobierno se ha manifestado siempre en defensa de la legalidad vigente en esta materia, "que vamos a continuar apoyando". Recordó diferentes intervenciones de miembros del Gobierno en las que se reitera que las competencias exclusivas en materia de relaciones internacionales, que contempla la Constitución, no son compatibles con el reconocimiento internacional de las federaciones deportivas autonómicas, lo que es refrendado por sentencias del Tribunal Constitucional.
"La postura del Gobierno", decía, "también es coincidente con las normas internacionales", ya que en la Carta Olímpica el reconocimiento de una federación nacional por el Comité Olímpico Internacional queda supeditado a las organizaciones, cuya jurisdicción coincide con los límites de un Estado independiente, reconocido por la comunidad internacional". Insistía en que no van a "descalificar a las selecciones autonómicas y les animamos a competir" y animó a, entre todos, buscar fórmulas de diálogo, "pero aceptando que en las competiciones internacionales oficiales la selección deportiva tiene que ser la española".
Durante el debate, los diputados de ERC exhibieron camisetas de la selección deportiva catalana en sus escaños, lo que motivó que Manuel Marín, les dijera pasados unos minutos que "como me imagino que lo que pretendían es la foto y ya la tienen, por favor retiren la tienda". Posteriormente, los diputados de ERC, a través de un comunicado, se mostraron "dolidos" por las palabras de Marín, ya que su acción ha sido "pacífica, silenciosa, respetuosa y sin interrumpir a nadie" y recordaron que nunca han participado en abucheos, ni discusiones que alterarán el orden del Congreso, "al contrario que los grupos mayoritarios que se abroncan a menudo".
Durante la sesión de control, la ministra recordaba que la postura del Gobierno es de que no hay nada en contra de las selecciones autonómicas y precisó que no ha realizado ninguna gestión sobre patinaje. Canet, ya en castellano, dijo que el Ejecutivo reconoció que las federaciones internacionales tienen carácter de asociaciones sometidas al derecho privado y ha manifestado que no tenía previstas actuaciones para impedir el reconocimiento internacional de la Federación Catalana de Patinaje. En su opinión, "algunos indicios parecen contradecir esta voluntad", ya que la Federación Catalana ha obtenido el reconocimiento oficial provisional, por lo que su selección participa actualmente en el campeonato mundial.
Antes, dijo, tuvo que superar el escollo de una propuesta de exclusión presentada por algunas federaciones y ello coincide con declaraciones del presidente de la federación española de patinaje, "de las que se puede deducir una actitud de claro boicoteo". A su juicio, ello sería contradictorio con el texto aprobado en el Congreso, votado también por el PSOE, que instaba al Gobierno a impulsar la presencia, en competiciones internacionales, de las selecciones deportivas autonómicas". Precisó que la demanda de ese reconocimiento internacional no proviene de las formaciones políticas catalanas, sino de la "inmensa mayoría de la sociedad catalana".
La ministra afirmó el Gobierno se ha manifestado siempre en defensa de la legalidad vigente en esta materia, "que vamos a continuar apoyando". Recordó diferentes intervenciones de miembros del Gobierno en las que se reitera que las competencias exclusivas en materia de relaciones internacionales, que contempla la Constitución, no son compatibles con el reconocimiento internacional de las federaciones deportivas autonómicas, lo que es refrendado por sentencias del Tribunal Constitucional.
"La postura del Gobierno", decía, "también es coincidente con las normas internacionales", ya que en la Carta Olímpica el reconocimiento de una federación nacional por el Comité Olímpico Internacional queda supeditado a las organizaciones, cuya jurisdicción coincide con los límites de un Estado independiente, reconocido por la comunidad internacional". Insistía en que no van a "descalificar a las selecciones autonómicas y les animamos a competir" y animó a, entre todos, buscar fórmulas de diálogo, "pero aceptando que en las competiciones internacionales oficiales la selección deportiva tiene que ser la española".