L D (Agencias) En rueda de prensa en el Congreso, Zaplana llamó la atención sobre la rapidez con que, en su opinión, "se han apresurado a divulgar" las conversaciones de presos etarras negando vínculos con los islamistas, justo al día siguiente de que se diera a conocer que uno de los detenidos por la célula terrorista que pretendía atentar contra la Audiencia Nacional guardaba anotaciones con datos de dos etarras encarcelados.
"Los mismos que dan un valor y un reconocimiento a los etarras, se niegan a que vengan los confidentes a la comisión del 11-M, dijo Zaplana en alusión a los socialistas. “Decían que cómo se iba a dar veracidad a las declaraciones de un confidente, pero ésos mismos citan ahora a etarras que seguro sabían que estaban siendo escuchados”, añadió.
A su juicio, el PP es el único que puede seguir manteniendo las declaraciones que ha venido haciendo en relación con los atentados islamistas, pues "siempre" han defendido que no había que descartar nada y que había que investigar, también las conexiones entre organizaciones terroristas. "Otros han hecho chistes, han dicho que estábamos locos y que estaba todo claro", comentó Zaplana.
Por todo ello, insistió en la comparecencia en el Congreso del ministro del Interior, José Antonio Alonso, que a su juicio se ha ofrecido ahora desde el Gobierno ante "una situación de presión" por parte de la opinión pública y los medios de comunicación. "Tenían que buscar una válvula de escape", concluyó Zaplana.
Habrá pregunta parlamentaria
Así, el PP preguntará al Gobierno en la próxima sesión de control en el Congreso, por la filtración para conocer si "la intención del filtrador responde a una estrategia para tapar indicios que están apareciendo o para desviar la atención". Por eso exige saber quién es el responsable de la misma, habida cuenta, además, que la custodia de esas cintas es responsabilidad del Ministerio del Interior.
En un comunicado de prensa, el Grupo Popular señala además que la filtración de este tipo de conversaciones de los presos de la banda terrorista "puede aumentar el riesgo a la seguridad de los aludidos en esas cintas", es decir, del diario El Mundo y del propio Partido Popular.