L D (EFE) El presidente de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) y primer teniente de alcalde, Xavier Casas, compareció este lunes en rueda de prensa junto con el consejero delegado de TMB, Constantí Serrallonga, y el director general del Metro, Agustín Castillo, para explicar el accidente y las primeras medidas adoptadas. El accidente ocurrió a las 13.26 horas del domingo cuando un convoy, que salía de la estación de Penitents salió en dirección a la de Vall d'Hebron.
El tren partió con el semáforo en rojo al contar con la autorización del centro de control de La Sagrera que, previamente, había comprobado que no había ningún otro convoy en la vía y que las agujas estaban en posición correcta, un procedimiento que según los responsables de TMB es "habitual". Unos trescientos metros después, y cuando circulaba a una velocidad de unos 50 kilómetros por hora, el tren, en el que viajaban unas ochenta personas, fue desviado hacia una vía secundaria y chocó contra otro que estaba parado porque así lo permitió la aguja de cambios.
La comisión de investigación creada por TMB deberá determinar por qué la aguja estaba en una posición incorrecta, si fue un fallo humano o si los indicadores del centro de control de La Sagrera no funcionaron o bien si se produjo algún otro problema técnico. Para determinar todo ello cuentan con la información de las cajas negras de los dos trenes, las conversaciones grabadas del centro de control y con otros informes técnicos.
El tren partió con el semáforo en rojo al contar con la autorización del centro de control de La Sagrera que, previamente, había comprobado que no había ningún otro convoy en la vía y que las agujas estaban en posición correcta, un procedimiento que según los responsables de TMB es "habitual". Unos trescientos metros después, y cuando circulaba a una velocidad de unos 50 kilómetros por hora, el tren, en el que viajaban unas ochenta personas, fue desviado hacia una vía secundaria y chocó contra otro que estaba parado porque así lo permitió la aguja de cambios.
La comisión de investigación creada por TMB deberá determinar por qué la aguja estaba en una posición incorrecta, si fue un fallo humano o si los indicadores del centro de control de La Sagrera no funcionaron o bien si se produjo algún otro problema técnico. Para determinar todo ello cuentan con la información de las cajas negras de los dos trenes, las conversaciones grabadas del centro de control y con otros informes técnicos.
Expertos del Colegio de Ingenieros
Xavier Casas destacó la decisión de incorporar a la comisión a expertos independientes procedentes del Colegio de Ingenieros, además de pedir la "supervisión" de la dirección general de Puertos y Transportes de la Generalidady de la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM). Como primera medida, la aguja de cambios que hizo desviar al tren ha sido inmovilizada de forma que sólo permite circular por la vía general y no se puede acceder a la vía secundaria, que va a parar a las cocheras de Sant Genís, donde estaba parado el segundo tren implicado en el accidente y que se disponía a realizar una maniobra en el interior de los talleres.
Los sistemas de seguridad del metro de Barcelona aprobaron con éxito los pasados días 9, 10 y 11 de octubre una auditoría del certificado ISO 9000 y ya ha instalado en las líneas 2, 4, 5 y 11 un sistema, denominado ATP, que establece la velocidad de los trenes y las distancias de seguridad automáticas con otros convoyes. Este sistema, que en teoría impediría un accidente como el ocurrido el domingo, todavía no está instalado en las líneas 1 y 3, en la que ocurrió el siniestro. A consecuencia del accidente unos cincuenta viajeros, además del conductor del tren y de un maquinista que se encontraba en el interior del otro convoy accidentado, resultaron heridos.
Xavier Casas destacó la decisión de incorporar a la comisión a expertos independientes procedentes del Colegio de Ingenieros, además de pedir la "supervisión" de la dirección general de Puertos y Transportes de la Generalidady de la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM). Como primera medida, la aguja de cambios que hizo desviar al tren ha sido inmovilizada de forma que sólo permite circular por la vía general y no se puede acceder a la vía secundaria, que va a parar a las cocheras de Sant Genís, donde estaba parado el segundo tren implicado en el accidente y que se disponía a realizar una maniobra en el interior de los talleres.
Los sistemas de seguridad del metro de Barcelona aprobaron con éxito los pasados días 9, 10 y 11 de octubre una auditoría del certificado ISO 9000 y ya ha instalado en las líneas 2, 4, 5 y 11 un sistema, denominado ATP, que establece la velocidad de los trenes y las distancias de seguridad automáticas con otros convoyes. Este sistema, que en teoría impediría un accidente como el ocurrido el domingo, todavía no está instalado en las líneas 1 y 3, en la que ocurrió el siniestro. A consecuencia del accidente unos cincuenta viajeros, además del conductor del tren y de un maquinista que se encontraba en el interior del otro convoy accidentado, resultaron heridos.
El conductor sigue grave
El conductor, Pedro F. se recupera de la operación a la que le fue sometido el domingo por la noche en el hospital Valle de Hebron a causa de una fractura en la tibia y en la rodilla y su estado es grave, aunque estable. Pedro F., de 57 años, trabaja en TMB desde hace 27 años y durante los últimos quince ha sido conductor de trenes.
En cuanto a los pasajeros, unos 50 necesitaron algún tipo de asistencia sanitaria y 26 fueron ingresados durante algunas horas en Valle de Hebron, donde tres de ellas siguen ingresadas en observación. Además, otros ocho viajeros han acudido esta mañana a este centro sanitario para ser atendidas de contusiones. Otros once pasajeros fueron atendidos en centros hospitalarios, tres de ellos en Sant Pau y ocho en el de la Esperanza, pero se les pudo dar el alta en las siguientes horas.
El conductor, Pedro F. se recupera de la operación a la que le fue sometido el domingo por la noche en el hospital Valle de Hebron a causa de una fractura en la tibia y en la rodilla y su estado es grave, aunque estable. Pedro F., de 57 años, trabaja en TMB desde hace 27 años y durante los últimos quince ha sido conductor de trenes.
En cuanto a los pasajeros, unos 50 necesitaron algún tipo de asistencia sanitaria y 26 fueron ingresados durante algunas horas en Valle de Hebron, donde tres de ellas siguen ingresadas en observación. Además, otros ocho viajeros han acudido esta mañana a este centro sanitario para ser atendidas de contusiones. Otros once pasajeros fueron atendidos en centros hospitalarios, tres de ellos en Sant Pau y ocho en el de la Esperanza, pero se les pudo dar el alta en las siguientes horas.