L D (EFE) Durante la clausura del XI Congreso Regional del PP vasco, en el que San Gil fue elegida presidenta del partido en el País Vasco, Rajoy advirtió a las fuerzas políticas y a las instituciones de que "las diferencias y las discrepancias no tienen por qué manifestarse como grescas continuas".
Para el dirigente popular "España tiene un mal Gobierno sin criterios claros en los grandes temas que importan a los españoles", entre los que citó la reforma de la Constitución, la reforma de los Estatutos de Autonomía, y la políticas económica o de inmigración.
Rajoy también defendió el Estatuto de Gernika como "seña de identidad" del PP vasco, e hizo de las críticas al nacionalismo y de la firmeza democrática ante el terrorismo los ejes del resto de su intervención. También explicó que la lucha contra ETA "va mejor", porque se les ha "evaporado" la confianza en el triunfo, se han dado cuenta de que los asesinatos "no ayudan a sus fines" y saben que su derrota "es cuestión de tiempo".
El líder popular afirmó que el PNV nunca estará "satisfecho" con lo que consiga el País Vasco, y aseguró que aunque formaran un "Estado libre asociado" con España "inventaría algo para seguir reclamando cosas", en una "carrera hacia el infinito" que genera "inestabilidad institucional y dificulta el crecimiento económico" sin buscar "un país para todos".
Rajoy también lamentó que el Gobierno socialista carezca de "ideas claras" sobre este asunto y que se mueva "al aire que más sopla, porque no quiere coincidir con el PP ni irritar al PNV", con lo que se ha convertido en un Ejecutivo que "no sabe qué hacer con España".