LD (Agencias) Los títulos de Abbey, que cotizaban en el índice principal FTSE-100 de Londres, cerraron en 643,50 peniques, 4 peniques más que la jornada anterior (un 0,63 por ciento más), después de mantener durante toda la semana una tendencia al alza.
A través de Abbey, el Santander espera contrarrestar sus riesgos en América Latina, así como expandir su negocio en Europa mediante un plan de ahorro de costes y de tecnologías de la información en la entidad británica, que en los dos últimos años registró pérdidas.
Abbey National cuenta con unos 175.500 millones de euros en activos, 18 millones de clientes, 26.000 empleados y 741 oficinas, mientras que el Santander tiene presencia en Alemania, Polonia, Hungría, Italia y Portugal, además de en la mayoría de países de América Latina, cuya mayor exposición al riesgo trata de compensar ahora con su inversión en el rentable mercado británico.
El pasado 26 de julio, el Santander acordó con el consejo de Abbey la compra de esa entidad por 13.400 millones de euros en metálico y acciones, y el 14 de octubre la operación fue aprobada por el 95 por ciento del capital del banco británico. Esta semana, el Tribunal Superior de Londres y el Banco de España aprobaron definitivamente la operación.
A través de Abbey, el Santander espera contrarrestar sus riesgos en América Latina, así como expandir su negocio en Europa mediante un plan de ahorro de costes y de tecnologías de la información en la entidad británica, que en los dos últimos años registró pérdidas.
Abbey National cuenta con unos 175.500 millones de euros en activos, 18 millones de clientes, 26.000 empleados y 741 oficinas, mientras que el Santander tiene presencia en Alemania, Polonia, Hungría, Italia y Portugal, además de en la mayoría de países de América Latina, cuya mayor exposición al riesgo trata de compensar ahora con su inversión en el rentable mercado británico.
Esta compra, que ha sido completada en un tiempo récord de tres meses, es la mayor operación transfronteriza en la Unión Europea y permitirá que la entidad española se convierta en el cuarto banco de Europa y octavo del mundo en capitalización bursátil, con más de 52.000 millones de euros (67.000 millones de dólares). El grupo que preside Emilio Botín se ha comprometido a que Abbey obtenga en 2007 ingresos de hasta 220 millones de euros gracias a un mayor desarrollo de la franquicia del banco, pues ofrecerá más productos por cliente.
Según anunció el presidente del Santander, Emilio Botín, en la última junta extraordinaria de accionistas, el actual director financiero del SCH, Francisco Gómez Roldán, se convertirá en el nuevo consejero delegado del británico Abbey National, aunque el presidente del Abbey, Terry Burns, mantendrá su puesto al frente del banco británico. Además, el hasta ahora primer ejecutivo del Abbey, Luqman Arnold, se convertirá en asesor personal de Emilio Botín, en tanto Gómez Roldán será sustituido por José Antonio Álvarez, actual director general adjunto de Gestión Financiera.
El SCH se convierte en la empresa del Ibex con mayor número de acciones
Los accionistas de Abbey recibirán por cada uno de sus títulos una acción del Santander más un metálico de 31 peniques (46 céntimos de euro): 25 peniques del Santander y un dividendo extraordinario de 6 peniques. Para ejecutar ese canje, el Santander emitirá 1.511,37 millones de acciones nuevas, que serán financiadas mediante una ampliación de capital de 756 millones de euros.
Las nuevas acciones del Santander cotizarán desde el martes 16 en la Bolsa española, donde la entidad que preside Emilio Botín será la empresa del Ibex-35 con mayor número de acciones, cerca de 6.300 millones. Además, el Santander espera volver a cotizar en la Bolsa de Londres en el primer semestre de 2005, aunque es previsible que numerosos accionistas de Abbey se desprenderán de sus títulos, un proceso que podrán completar sin costes.
Las nuevas acciones del Santander cotizarán desde el martes 16 en la Bolsa española, donde la entidad que preside Emilio Botín será la empresa del Ibex-35 con mayor número de acciones, cerca de 6.300 millones. Además, el Santander espera volver a cotizar en la Bolsa de Londres en el primer semestre de 2005, aunque es previsible que numerosos accionistas de Abbey se desprenderán de sus títulos, un proceso que podrán completar sin costes.