L D (Agencias) Duran cree que el Gobierno "tiene que reflexionar a fondo sobre dónde y con quién quiere ir", porque, si no lo hace, "tarde o temprano será víctima política de sus propias contradicciones". A su juicio, Bono "no pierde oportunidad de marcar distancias políticas con Zapatero, por si acaso y pensando en el futuro". "A Bono le va la marcha y no hay quien le pare. Le puede más el corazón que la razón", apuntó. De hecho, recordó que en las últimas tres semanas el ministro de Defensa ha hecho varias declaraciones "polemizando indirectamente" con el presidente del Gobierno acerca de su intervención en el Senado con el concepto de nación y ensalzando el papel del Ejército "como garantía de la unidad española". Por ello admitió que no le sorprenden las palabras del ministro.
En la misma línea, el diputado del PNV Emilio Olabarría señaló que el discurso de Bono pone de manifiesto que el PSOE "es víctima de una cierta crisis de identidad ideológica" y "da una cierta imagen de desorden y de falta de liderazgo y autoridad". Así, emplazó a Zapatero a decir con claridad si considera a España "una nación única" o un "Estado plurinacional con realidades naturales diversas". Olabarría admitió que el PNV preferiría que Zapatero fuese esa "voz única y con suficiente autoridad" en el PSOE y avisó al jefe del Ejecutivo de que para poder concertar asuntos con el PNV tendrá "inevitablemente que resolver ese grave problema". "Esperamos que haya una clarificación mínima para que el PSOE no sea víctima o tributario de tantas sensibilidades porque hay algunas que se aproximan al PP y otras a lo que pueden mantener partidos nacionalistas", añadió.
Contentar al "amplio" sector "españolista" del PSOE
Desde el BNG, su portavoz en el Congreso, Francisco Rodríguez, calificó de "muy desafortunadas" las palabras del titular de Defensa y añadió que ponen de manifiesto una "lectura restrictiva" del texto constitucional y un rechazo a modificarlo, algo que, a su juicio, es "ahistórico, antidemocrático y antipopular". "Las declaraciones de Bono tienen un tufo claramente oportunista, descubren el alma que hay dentro del PSOE bajo capas de apariencia y tratan de contentar a los sectores del PSOE más españolistas, que son muy amplios", declaró el dirigente nacionalista a Europa Press.
Por su parte, el portavoz de Izquierda Verde (IU-ICV), Joan Herrera, pidió al ministro que no opine cuando lo que vaya a decir esté en contra del modelo de estado cuyo debate está ahora encima de la mesa y que se está intentando consensuar con todas las formaciones políticas. Herrera, que tildó de "muy desafortunadas" sus manifestaciones, dijo que "parecen más propias de la definición de Estado del Partido Popular que de la nueva mayoría de gobierno". Tras confiar en que sus palabras "hayan sido un calentón", aseguró que un ministro de Defensa "no debería necesitar reafirmarse de forma tan recurrente hablando de la unidad de España".