LD (Agencias) El ministro de Trabajo, Jesús Caldera insiste en negar la mayor. A pesar de que los empresarios han rechazado firmar el acuerdo sobre el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) debido a su exclusión en la redacción definitiva, el titular de Trabajo insiste en afirmar "el diálogo no está roto" y se reanudará la semana que viene.
Respecto a la opinión expresada por el vicepresidente y ministro de Economía, Pedro Solbes, quien también se mostró en contra de esta cláusula de revalorización automática, el ministro Caldera ha dicho que nadie “busque diferencias en el seno del Gobierno porque no las hay".
Mientras Caldera intenta conciliar las posturas enfrentadas y se muestra confiando en la posibilidad de un nuevo acuerdo, los sindicatos insisten en que “el acuerdo ya está cerrado”. El secretario general de UGT, Cándido
Méndez, ha afirmado que éste es "un tema que está resuelto" a través de un sistema que el sindicato considera "idóneo". A pesar del panorama, el ministro de Trabajo sigue afirmando que "sólo hay distintas opiniones sobre en la forma y no en el contenido" ya que las partes coinciden en que el salario debe subir a los 600 euros y en que no puede perder poder adquisitivo.