(Libertad Digital) Según una providencia de la Sala Tercera de la Sección de lo Penal de la Audiencia Nacional, publicada por la agencia Efe, el magistrado Antonio Díaz Delgado será el presidente del tribunal que enjuiciará a los tres directivos.
En la Sala encargada de acoger este juicio oral, Luis Antonio Martínez de Salinas actuará como magistrado ponente, acompañado también por la juez Raimunda de Peñafort Lorente Martínez.
Las sesiones del juicio se celebrarán los lunes, martes y miércoles, según estaba previsto antes de que se produjera un primer retraso -por la enfermedad del abogado de Francisco Franco Otegui- y un segundo aplazamiento, hasta decidir la recusación del juez Javier Gómez-Bermúdez, quien fue apartado de esta causa por la Sala de Justicia de la Audiencia Nacional.
Según recuerda la providencia, el magistrado Antonio Díaz Delgado, compuso la Sala que juzgó y condenó por el caso Banesto a Rafael Pérez Escolar, que ahora encabeza una de las dos acusaciones en el juicio de las jubilaciones millonarias.
El Fiscal pidió en 4 ocasiones el sobreseimiento del caso
El caso de las jubilaciones comenzó cuando se conoció que Amusátegui y Corcóstegui cobraron sendas indemnizaciones de 43,7 y 108 millones de euros, respectivamente, al abandonar la entidad a mediados de 2001 el primero y a principios de 2002, el segundo. Rafael Pérez Escolar, ex consejero de Banesto en la época de Mario Conde, y el abogado Francisco Franco Otegui, presentaron una querella contra Corcóstegui, Amusátegui y Botín por considerar que recibieron las mencionadas indemnizaciones al dejar la entidad "para dejar el campo libre a Botín".
La juez de la Audiencia Nacional, Teresa Palacios, fue la que decidió la apertura de juicio oral, a pesar de que el Ministerio Fiscal de pidió el sobreseimiento del caso en cuatro ocasiones, la primera en septiembre de 2003, al no apreciar delitos en las indemnizaciones cobradas por Corcóstegui y Amusátegui; y la última el 16 de junio de 2004.
Según los consejeros, "el importe de las retribuciones se ajusta al mercado, teniendo en cuenta, además, la extraordinaria contribución y el alcance de las responsabilidades de quienes fueron copresidente y consejero delegado del banco, especialmente en el excepcional proceso tras la fusión", que "no hubiera sido posible sin la dedicación de Amusátegui y Corcóstegui".