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Amusátegui y Corcóstegui niegan haber cobrado para ceder poder a Botín en el Santander

El ex copresidente del entonces BSCH, José María Amusátegui, ha negado ante el juez de la Audiencia Nacional que hubiera impuesto el bono de 43 millones de euros como condición para dejar de ser administrador de la entidad. Por su parte, el ex consejero delegado del Santander, Ángel Corcóstegui, ha afirmado que dejó la entidad por estrés y no cobró por ello sino por el éxito de la fusión y los derechos de pensiones de toda su vida laboral.

L D (EFE) El ex copresidente del Banco Santander Central Hispano (BSCH), José María Amusátegui, ha dejado claro que si la operación de fusión entre los bancos Santander y Central Hispano "no hubiese tenido éxito" él "no hubiese cobrado" el montante de 43,8 millones de euros establecidos como bonus de jubilación. Amusátegui ha explicado que estas remuneraciones fueron acordadas por el Consejo de Administración y "nadie le impuso condiciones, ni delegación de funciones" para esta operación entre bancos.

Al igual que hiciera Emilio Botín el pasado lunes, Amusátegui también se ha negado a contestar las preguntas de las acusaciones particulares para no "contribuir a la confusión". Éstas le han preguntado si acordó con Botín, a espaldas del Consejo de Administración, su propia jubilación, y si se "blindó" el contrato como condición para la fusión entre los dos bancos.

A preguntas del ministerio fiscal, Amusátegui ha defendido el "éxito" de la fusión, que "ha servido de modelo para otros casos", y ha afirmado que sus retribuciones y las del ex consejero delegado, Ángel Corcóstegui, se acordaron como "decisiones justas y adecuadas" y se decidieron "de acuerdo con las condiciones del mercado y la trayectoria de uno y otro".

Amusátegui ha insistido en que "no hubo condiciones para su cese" pues se iba a jubilar a los setenta años, "porque lo recomendaba el código Olivencia, llevaba una vida demasiado dura" y necesitaba ya "un merecido descanso". En esta misma línea, Ángel Corcóstegui, ha afirmado que dejó su puesto en la entidad porque estaba "agotado" y no tenía fuerzas para continuar.

El ex consejero delegado ha negado que Emilio Botín le hubiera presionado para dejar la entidad y mucho menos que le ofreciera dinero; muy al contrario, el presidente del Santander le ofreció unas semanas de vacaciones para que superara esos momentos de agotamiento y hasta se ofreció a hablar con su familia. Corcóstegui coincidió en todas sus declaraciones con las aportadas durante la mañana por el ex copresidente de la entidad, José María Amusátegui, y las ofrecidas el lunes por el actual presidente del Grupo, Emilio Botín.

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