LD (EFE) El portavoz del Ministerio del Interior de Georgia, Guram Donadze, ha confirmado de que al menos tres personas han muerto y otras diez se encuentran heridas después de que estallara un coche-bomba estacionado frente a una oficina de la Policía en la ciudad de Gori.
Entre los heridos "hay varios graves" indicó la fuente y añadió que el ministro del Interior y Seguridad de Georgia, Ivané Mirabishvili, se trasladó con urgencia a Gori para investigar "in situ" las circunstancias de lo ocurrido.
La explosión del coche-bomba, un Lada ruso, según versiones preliminares, cargado con trilita, fue de tal potencia que los habitantes de Gori "creyeron que se había producido un terremoto", según una cadena de televisión local. Mijaíl Karelia, gobernador del distrito de Shida Kartli, del que Gori forma parte, no vaciló en afirmar que se produjo un atentado terrorista y precisó que el automóvil, estacionado cerca de la sede policial, no llevaba matrícula.
A causa de la explosión del coche-bomba una decena de automóviles aparcados en el lugar del suceso sufrieron desperfectos e incluso algunos resultaron incendiados, al tiempo que la ola expansiva rompió las ventanas de varias casas cercanas.