Caldera respondió así en la sesión de control a una pregunta del diputado de Izquierda Verde Joan Herrera, quien pidió que se amplíe el plazo para este proceso (que va del 7 de febrero al 7 de mayo), así como "mayor flexibilidad", de manera que el certificado de empadronamiento no sea la única vía para demostrar la estancia en España desde el momento que requiere este proceso.
"Estamos siendo flexibles -dijo Caldera, y aludió a los trabajadores agrarios en relación con las heladas-, pero si hay en la Mesa de Diálogo Social planteamientos rigurosos de flexibilidad, los tendremos en cuenta". El ministro agregó que una vez concluido el actual proceso de normalización, "seremos inflexibles". Herrera señaló en su intervención que hay empresarios que en lugar de regularizar a los inmigrantes, les está despidiendo, manifestación ante la cual Caldera pidió al diputado que denuncie los casos que pueda conocer.
Al principio del proceso "les pedimos a los empleadores que no acumularan sus peticiones en los primeros días, ahora creo que hay que insistir en que vayan ya presentándolas, la Administración funciona correctamente y lo mejor sería no dejar las peticiones hasta el último momento". Advirtió que al final del proceso -el 7 de mayo- se ejecutarán 500.000 inspecciones de trabajo. Hasta la fecha se han rechazado 490 expedientes y 1.639 están pendientes de adjuntar el certificado de antecedentes penales, afirmó el ministro, quien recordó que es válido el resguardo de petición de este último documento para tramitar los papeles. Los datos -en opinión de Caldera- demuestran que el proceso marcha "excelentemente", el número de solicitudes es "muy elevado".
Flexibilidad en el sector agrario
Por otro lado dijo que Murcia, con 5.599 solicitudes, es "un caso singular, las peticiones están empezando a crecer, me alegro, pero aún es insuficiente, es cierto que puede tener que ver con los factores climatológicos, hay una alta concentración de trabajo agrario y por tanto las heladas han podido influir en este proceso". A tal fin anunció que hay conversaciones con los sindicatos agrarios para hallar fórmulas que flexibilicen "la interpretación del reglamento de extranjería: "estamos estudiando la hipótesis de un contrato temporal a tiempo parcial con compromiso de actividad de tres meses pero hasta final de año, es decir que se pueda presentar la solicitud de legalización y el trabajo efectivo se pueda hacer a lo largo del año".
Ello permitirá incorporarse al proceso la mayoría de los trabajos afectados por las heladas, "vamos a ser flexibles con ese argumento", agregó Caldera quien indicó que este asunto habrá de ser dialogado y acordado con todos los agentes sociales. Informó además que ya hay varios centenares de altas definitivas en la Seguridad Social -tras la aceptación del expediente el empresario tiene un mes para afiliar a su trabajador inmigrante-, y rechazó que los empresarios estén despidiendo a sus empleados extranjeros.