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El Plan integral contra la piratería llegará cuando la creación "esté al borde de su desaparición"

Abogados, gestores y protectores de los derechos de la propiedad intelectual han hecho piña para afirmar que la legislación que prepara el Gobierno con el fin de atajar el fenómeno de la piratería va "por el buen camino", aunque llega "con retraso", por lo que, cuando se produzca su aplicación real, la industria de la creación estará al borde de "desaparecer".

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L D (EFE) Estas fueron algunas de las ideas que se hicieron este jueves patentes en una tertulia sobre el "Presente y futuro en el sector de la propiedad intelectual" en el que participaron el director general de la Federación para la Protección de la Propiedad Intelectual (FAP), José Manuel Tourné; el director de Relaciones Institucionales de la SGAE, Pedro Farré, y abogados y asesores de consultorías dedicadas a frenar el fenómeno de la piratería.
 
Todos ellos consideran que "las leyes pueden solucionar y corregir el problema" de la piratería aunque éstas "van siempre con retraso" y en un mundo, el de las nuevas tecnologías, que avanza "de forma vertiginosa", según puso de manifiesto el director de la FAP. Otra cosa es que exista una clara voluntad de abordar legalmente el problema: "Dile a un político que se enfrente a los electores de 18 y 24 años, y de más, porque el segmento de población que piratea va aumentando, y les diga que les va a cortar el tema de bajarse la música. ¿Qué político no afronta eso con cierta tibieza?", apuntaba en el debate el director del Foro de Evidencias Electrónicas, José María Anguiano. Para él "la clara impunidad" que rodea a "la ciberdelincuencia" "no está justificada".
 
Ellos reclaman una concienciación de la sociedad y una implicación en la lucha contra la piratería –que, por ejemplo, ha provocado pérdidas de entre el 32 y el 35 por ciento en la industria musical, aseguran– de muchos sectores afectados, desde los propios artistas a "los comerciantes que cumplen sus deberes", desde dueños de salas de cine a vídeo clubes. Las nuevas legislaciones que el Gobierno prepara en esta materia, una nueva Ley de Propiedad Intelectual y un Plan Integral contra la Piratería que están en fase de borrador, deberían, en su opinión, afrontar una nueva realidad que las actuales leyes contemplan de forma más difusa.
 
Connivencia de los políticos
 
Por ejemplo, creen que los compradores de los denominados "top manta" incurren claramente en un delito de receptación y que las empresas de Internet deberían asumir responsabilidades: "si una persona llama a un servidor y le dice que en tal sitio hay pornografía infantil, rápidamente la cierran, pero si les digo que en ese sitio hay piratería no hacen nada", contaba Tourné, quien asegura que entre los "manteros", además de personas en situaciones cercanas a la esclavitud, hay otros que "ganan 5.000 euros limpios al mes".
 
Para el representante de la SGAE, España se debería plantear hacer "un gran pacto de autorregulación" para crear "un modelo sostenible en el que todos ganemos en Internet", algo que se hizo el año pasado en Francia y que está obteniendo unos "resultados razonables". Pero la lucha contra la piratería en un sector industrial que en los países desarrollados supone entre un 8 y un 9 por ciento del Producto Interior Bruto, se enfrenta a que son delitos tan habituales y asumidos que hasta los abogados que llevan causas de este tipo (que se ganan en un 90 por ciento de los casos) se enfrentan a jueces que en sus despachos tienen CDs piratas.
 
Se trata de una realidad tan amplia que a veces sucede en los lugares menos sospechados, como destacó una abogada de CEDRO que acusó a las Administraciones Públicas y las Cámaras de Comercio, en una de cuyas sedes se celebraba el debate, de ser algunos de los entes que más fotocopian ilegalmente.

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