LD (Agencias) En un mensaje a la nación, el presidente de Bolivia, Carlos Mesa, anunció que propuso al Congreso convocar elecciones anticipadas para instalar un Congreso Constituyente el próximo mes de septiembre, en un intento por resolver la crisis social y política del país.
Sin embargo, el opositor partido Movimiento Al Socialismo (MAS), dirigido por el líder cocalero Evo Morales, ha rechazado de inmediato el plan de Mesa y lo tachó de ser un "chantaje" para "frenar" el debate en el congreso del proyecto de la nueva Ley de Hidrocarburos. En caso de no aceptarse la propuesta de Mesa, indicó el diputado oficalista, Wilman Cardozo, el mandatario renunciará a su cargo.
Ocho días después de haber sido ratificado en el cargo por el Congreso, el jefe del Estado sugirió que los comicios se celebren el próximo 28 de agosto, para que las nuevas autoridades tomen posesión el 28 de septiembre, dos años antes del vencimiento del actual periodo presidencial. En su discurso, expresó su "honda preocupación" porque el país se dirige a "un suicidio colectivo" por culpa de los sectores radicales, a quienes dijo haber tratado de convencer de que "por amor a Bolivia, cesen ese camino al despeñadero".
Mesa se dijo "frustrado" y "dolido" en sus objetivos, al tiempo que cuestionó al Congreso porque "no ha querido aprobar una ley (petrolera) viable" para la nación y también a la Fiscalía porque rechazó un pedido para detener a los que cierran los caminos. Además, se comparó con el ex presidente Walter Guevara, que el 31 de octubre de 1979 logró una resolución de la Organización de Estados Americanos favorable a la demanda marítima boliviana a Chile, "el mayor triunfo diplomático" del país, y al día siguiente fue derrocado por un golpe militar.