L D (EFE) Lamela aseguró que ha actuado con "cautela y prudencia" en el caso del hospital Severo Ochoa de Leganés y aseguró que las denuncias anónimas sobre presunta mala praxis médica en el servicio de Urgencias estaban muy bien documentadas y eran de "mucha gravedad".
En su comparecencia a petición propia en la Asamblea de Madrid, señaló que él nunca ha hablado de "eutanasia masiva" en las Urgencias del hospital, algo -dijo- que sí hizo el secretario general del PSM, Rafael Simancas. Para ilustrar esta acusación leyó unas declaraciones de Simancas el día 12 de marzo en las que el socialista dijo que en el Severo Ochoa se había realizado una “supuesta práctica continua de eutanasia activa sin consentimiento familiar, fuera de norma ética en las urgencias hospitalarias de Leganés sobre un número indeterminado todavía de personas y durante más de tres años”. “Sabemos –dijo Simancas en esa ocasión- que la denuncia no es nueva, que ha habido muchas en los últimos años y de manera reiterada sobre la alta mortalidad en este hospital, ignoramos la reacción del Gobierno regional ante estas denuncias”.
Lamela repasó durante su intervención, que fue seguida por la presidenta regional, Esperanza Aguirre, las actuaciones que ha llevado a cabo su departamento tras recibir la denuncia el pasado 8 de marzo y subrayó que antes de esta fecha la denuncia ya había sido enviada a la ministra de Sanidad, Elena Salgado, quien, según indicó el consejero, no le remitió el escrito hasta el 11 de marzo.
En su comparecencia a petición propia en la Asamblea de Madrid, señaló que él nunca ha hablado de "eutanasia masiva" en las Urgencias del hospital, algo -dijo- que sí hizo el secretario general del PSM, Rafael Simancas. Para ilustrar esta acusación leyó unas declaraciones de Simancas el día 12 de marzo en las que el socialista dijo que en el Severo Ochoa se había realizado una “supuesta práctica continua de eutanasia activa sin consentimiento familiar, fuera de norma ética en las urgencias hospitalarias de Leganés sobre un número indeterminado todavía de personas y durante más de tres años”. “Sabemos –dijo Simancas en esa ocasión- que la denuncia no es nueva, que ha habido muchas en los últimos años y de manera reiterada sobre la alta mortalidad en este hospital, ignoramos la reacción del Gobierno regional ante estas denuncias”.
Lamela repasó durante su intervención, que fue seguida por la presidenta regional, Esperanza Aguirre, las actuaciones que ha llevado a cabo su departamento tras recibir la denuncia el pasado 8 de marzo y subrayó que antes de esta fecha la denuncia ya había sido enviada a la ministra de Sanidad, Elena Salgado, quien, según indicó el consejero, no le remitió el escrito hasta el 11 de marzo.
Lamela recordó que tras recibir las denuncias se apartó cautelarmente de su puesto al coordinador de Urgencias, Luis Montes, y se ordenó una inspección que concluyó que no se podía afirmar ni descartar mala praxis medica en el tratamiento a los pacientes. Dijo que se ha actuado "respetando el principio de presunción de inocencia y la dignidad de los profesionales" y aseguró que si entonces la Consejería hubiese tenido pruebas de los hechos denunciados habría procedido a la interposición de la correspondiente querella.
En cuanto a la difusión de la noticia en los medios de comunicación, reiteró que ésta fue obra de una asociación y aseguró que el comunicado que emitió Sanidad tenía como objetivo evitar la alarma social. Recordó que el informe elaborado por los inspectores se centra en la revisión formal de 339 historias clínicas de pacientes, entre las que figuran 151 casos de sedación. Lamela subrayó que en el 48% de estos casos no constaba el consentimiento informado de las familias y añadió que el 37% de los pacientes eran oncológicos. Volvió asimismo a aludir a los 25 casos en los que se detectaron incidencias, que se centraban en "sedaciones no indicadas, excesivas o dudosas".
Tras repasar las actuaciones, Lamela arremetió contra Rafael Simancas y acusó a su partido y a otros miembros de la oposición de "adulterar, distorsionar y manipular de forma malintencionada e interesada con fines partidistas". Preguntó además en varias ocasiones durante su intervención qué es lo que tenía que haber hecho ante una denuncia de estas características y por qué no quiere el PSOE que se investigue y recordó que será una nueva comisión de expertos la que determinar si existe o no mala praxis médica.
Por su parte, la portavoz de IU, Caridad García Alvarez, aseguró que Lamela le habló de "eutanasia y homicidios" el día 11 de marzo cuando le llamó para informarle del asunto. Dijo que las actuaciones llevadas a cabo por la Consejería de Sanidad ponen de manifiesto "irresponsabilidad, imprudencia y mala praxis política" del consejero y añadió que estamos ante el mayor ataque a la sanidad pública de la historia.
En cuanto a la difusión de la noticia en los medios de comunicación, reiteró que ésta fue obra de una asociación y aseguró que el comunicado que emitió Sanidad tenía como objetivo evitar la alarma social. Recordó que el informe elaborado por los inspectores se centra en la revisión formal de 339 historias clínicas de pacientes, entre las que figuran 151 casos de sedación. Lamela subrayó que en el 48% de estos casos no constaba el consentimiento informado de las familias y añadió que el 37% de los pacientes eran oncológicos. Volvió asimismo a aludir a los 25 casos en los que se detectaron incidencias, que se centraban en "sedaciones no indicadas, excesivas o dudosas".
Tras repasar las actuaciones, Lamela arremetió contra Rafael Simancas y acusó a su partido y a otros miembros de la oposición de "adulterar, distorsionar y manipular de forma malintencionada e interesada con fines partidistas". Preguntó además en varias ocasiones durante su intervención qué es lo que tenía que haber hecho ante una denuncia de estas características y por qué no quiere el PSOE que se investigue y recordó que será una nueva comisión de expertos la que determinar si existe o no mala praxis médica.
Por su parte, la portavoz de IU, Caridad García Alvarez, aseguró que Lamela le habló de "eutanasia y homicidios" el día 11 de marzo cuando le llamó para informarle del asunto. Dijo que las actuaciones llevadas a cabo por la Consejería de Sanidad ponen de manifiesto "irresponsabilidad, imprudencia y mala praxis política" del consejero y añadió que estamos ante el mayor ataque a la sanidad pública de la historia.