L D (Europa Press) El titular de Defensa aseguró que había contestado al Juzgado, le ha remitido las cartas de las personas que, precisó, "me decían: yo vi cómo le agredían, cómo le insultaban". Cree que ahora es el Juzgado quien debe actuar, pero matiza que él no se ha personado para "juzgar a nadie porque, desde mi punto de vista, lo personal es lo menos importante". Bono explicó que él había acudido a la manifestación convocada por la AVT para "manifestar mi solidaridad con las víctimas y decir a los terroristas que tendrán que matarnos a todos para ganar y que no van a ganar".
Recordó que fue recibido con afecto en los primeros momentos, pero que pasado un cierto tiempo, algunas personas se acercaron iniciando una serie de insultos tales como: "cobarde, devuelve las tropas a Irak, defensor de maricones, otros me llamaban asesinos". Explica que pidió a su hijo que se marchara, porque, por "el aspecto de los que se acercaban pensaba que aquello no iba a acabar bien". "Mi hijo lo dudó, hasta que me llamaron asesino y dijo, ahora es cuando no me voy. Nada más que por eso ya siento una gran satisfacción, me sentí muy protegido", explicó.
"Luego --prosiguió-- intentaron golpearme de diversas maneras, mucha gente nos ayudó y nos protegió en su entorno, pero hubo algún puñetazo, algún puntapié, algún golpe en la espalda, hasta que llegaron a la Altura de la calle Peligros policías uniformados y nos ayudaron mucho". Recordó que incluso Ana María Vidal Abarca, presidenta de la Asociación de Víctimas, se fue. "Sentí rabia. Iba a estar con las víctimas y vi aquel espectáculo", exclamó. Según Bono, daría la impresión, "a juzgar por la carta de aquel señor, que mandó en la convocatoria, que se habían convocado, algunos al menos, para estar en contra del Gobierno, más que para estar en contra de los terroristas".
Pero precisó que él no tiene deseo alguno de que los terroristas se sientan satisfechos por "nuestras divisiones". Por ello, dijo haber contestado al Juzgado y remitido a este las cartas de las personas que decían: "yo vi cómo le agredían, cómo le insultaban". "Que el juzgado actúe, pero yo no me he personado para juzgar a nadie porque, desde mi punto de vista, lo personal es lo menos importante", sentenció. "No me calló el general Franco y no me iban a callar con cuatro gritos en una manifestación de las víctimas del terrorismo", concluyó.