L D (EFE) El piloto español cuenta en una larga entrevista con el dominical germano el secreto de su temperamento tranquilo, sus ansias constantes de ganar y adelantar -incluso cuando va en bicicleta-, la intensidad de su duelo con Michael Schumacher y la importancia determinante del automóvil y de los neumáticos para ganar. El duelo con Schumacher en el circuito de Imola, que acabó ganando el asturiano, fue, dice, "fantástico, quizás el mejor de mi carrera. Disfruté extremadamente manteniendo en jaque a Michael y luchando con él", dice Alonso.
Pero, "a pesar de Imola, Barcelona será quizás la cerrara más grande que haya corrido jamás", añade el piloto que puede contar en el circuito catalán con un aforo completo. El asturiano, escribe el diario alemán, podría convertirse este año en el campeón del mundo más joven de la historia de la Fórmula Uno, pues solo tiene 23 años. Preguntado sobre si cree que lo conseguirá, Alonso contesta que es "su mayor sueño" y que "las posibilidades son buenas".
Sus principales rivales, el alemán Schumacher (Ferrari) y el finlandés Kimi Raikkonen (Mclaren-Mercedes), son, a juicio de Alonso, igual de buenos como pilotos, "la diferencia la marcan sus coches". En cuanto a quién es el mejor piloto contesta: "Yo soy el mejor, igual que Michael piensa que él es el mejor o Kimi o (Jarno) Trulli (Toyota)". Lo importante es el coche, insiste Alonso, quien dice que se dio cuanta de eso cuando llegó a la Fórmula Uno, porque antes tenía que correr aún mejor y con más dedicación para compensar y para mantener simplemente el automóvil en la carretera.
"Con el Renault conduzco más rápido, pero también más relajado... todo depende de la técnica que tengo a mi disposición", explica. Preguntado sobre si el piloto es menos importante que la técnica contesta: "Absolutamente. Si no tienes el coche adecuado y los neumáticos que van con ello, ya puedes ser el mejor piloto del mundo". Lo que le queda por hacer al piloto es "no cometer errores y trabajar de forma óptima con el equipo y los técnicos".
Alonso, sin embargo, revela detalles de su estrategia en Imola que demuestran la importancia del piloto, cuando cuenta que su coche era más lento que en el Schumacher por las llantas que habían perdido aire, pero; "en las curvas lentas frené pronto para luego poder acelerar más rápido... y así tuve la situación bajo control". Además, ralentizó la carrera a conciencia en las ocho últimas vueltas para evitar encontrarse con los coches más lentos y ofrecer a Schumacher una posibilidad de adelantarle.
Lo que le importan de la carrera no es la velocidad en sí, que no le interesa si conduce solo, sino adelantar y ganar. "Es una cosa mental, si voy en bicicleta también tengo que adelantar", dice Alonso y cuenta que en otros deportes también quiere ganar siempre y que cuando pierde en el tenis tira la raqueta enfurecido. "Luchar es lo que más me gusta", dice. Mientras lucha mantiene la tranquilidad y eso es algo que no le cuesta pues, dice: "Soy así de nacimiento, ya era así de niño, mis padres también son así de tranquilos, parece que sea algo de familia".
Respecto a los rumores de que podría pasarse a Ferrari en la próxima temporada, contesta que esto es lo que se dice siempre del que encabeza la lista y que lo dirían igualmente de otro. En cuanto a si quiere seguir pilotando cuando tengan la edad de Schumacher, 36 años, contesta: "He entrado en la Fórmula Uno con 19 años. No podría interesarme, ni concentrarme tanto tiempo en ello".
Pero, "a pesar de Imola, Barcelona será quizás la cerrara más grande que haya corrido jamás", añade el piloto que puede contar en el circuito catalán con un aforo completo. El asturiano, escribe el diario alemán, podría convertirse este año en el campeón del mundo más joven de la historia de la Fórmula Uno, pues solo tiene 23 años. Preguntado sobre si cree que lo conseguirá, Alonso contesta que es "su mayor sueño" y que "las posibilidades son buenas".
Sus principales rivales, el alemán Schumacher (Ferrari) y el finlandés Kimi Raikkonen (Mclaren-Mercedes), son, a juicio de Alonso, igual de buenos como pilotos, "la diferencia la marcan sus coches". En cuanto a quién es el mejor piloto contesta: "Yo soy el mejor, igual que Michael piensa que él es el mejor o Kimi o (Jarno) Trulli (Toyota)". Lo importante es el coche, insiste Alonso, quien dice que se dio cuanta de eso cuando llegó a la Fórmula Uno, porque antes tenía que correr aún mejor y con más dedicación para compensar y para mantener simplemente el automóvil en la carretera.
"Con el Renault conduzco más rápido, pero también más relajado... todo depende de la técnica que tengo a mi disposición", explica. Preguntado sobre si el piloto es menos importante que la técnica contesta: "Absolutamente. Si no tienes el coche adecuado y los neumáticos que van con ello, ya puedes ser el mejor piloto del mundo". Lo que le queda por hacer al piloto es "no cometer errores y trabajar de forma óptima con el equipo y los técnicos".
Alonso, sin embargo, revela detalles de su estrategia en Imola que demuestran la importancia del piloto, cuando cuenta que su coche era más lento que en el Schumacher por las llantas que habían perdido aire, pero; "en las curvas lentas frené pronto para luego poder acelerar más rápido... y así tuve la situación bajo control". Además, ralentizó la carrera a conciencia en las ocho últimas vueltas para evitar encontrarse con los coches más lentos y ofrecer a Schumacher una posibilidad de adelantarle.
Lo que le importan de la carrera no es la velocidad en sí, que no le interesa si conduce solo, sino adelantar y ganar. "Es una cosa mental, si voy en bicicleta también tengo que adelantar", dice Alonso y cuenta que en otros deportes también quiere ganar siempre y que cuando pierde en el tenis tira la raqueta enfurecido. "Luchar es lo que más me gusta", dice. Mientras lucha mantiene la tranquilidad y eso es algo que no le cuesta pues, dice: "Soy así de nacimiento, ya era así de niño, mis padres también son así de tranquilos, parece que sea algo de familia".
Respecto a los rumores de que podría pasarse a Ferrari en la próxima temporada, contesta que esto es lo que se dice siempre del que encabeza la lista y que lo dirían igualmente de otro. En cuanto a si quiere seguir pilotando cuando tengan la edad de Schumacher, 36 años, contesta: "He entrado en la Fórmula Uno con 19 años. No podría interesarme, ni concentrarme tanto tiempo en ello".