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POR UN JUEZ DEL NORTE DE ITALIA

La escritora Oriana Fallaci será procesada por presunto vilipendio al Islam

Oriana Fallaci será procesada por supuesto vilipendio al Islám, después de que este martes un juez de Bérgamo (norte de Italia) rechazara archivar el caso y considerara que en su libro "La fuerza de la razón" hay expresiones ofensivas contra esa religión. El juez, Armando Grasso, acogió la petición de Adel Smith, presidente de la Unión de Musulmanes de Italia, quien el 8 de abril del año pasado presentó una querella contra Falaci por las expresiones contra el Islam reflejadas en el libro.

L D (EFE) El juez de primera instancia Grasso reconoció este martes que en el libro hay “expresiones inequívocamente ofensivas” contra el Islám “y los que practican esa religión”. El juez ha pedido a la fiscalía de Bérgamo (que tiene competencias en el caso porque el libro fue imprimido allí) que en diez días presente los cargos contra la escritora. Después será fijada la fecha del juicio. Tras conocer la decisión del juez, la famosa escritora aseguró que se trata de una acusación “forzada”.

Por su parte, Adel Smith, presidente de la Unión de Musulmanes de Italia, expresó su satisfacción, acusando a Oriana Fallaci de haberse prodigado en propagar el odio contra el Islám y los musulmanes, “distorsionando hechos históricos reales e inventando otros, calumniando, ofendiendo y difamando a los musulmanes de todo el mundo”.
 
El dirigente musulmán agregó que no sólo en este libro injuria al Islám. Según Smith también ofendió a los musulmanes en el anterior libro “La rabbia e l'orgoglio” (La rabia y el orgullo), “al escribir expresiones como jodidos hijos de Alá”.
 
La gubernamental Liga Norte critica la decisión del juez.
 
La decisión del juez ha sido fuertemente criticada por la gubernamental Liga Norte, cuyo jefe en el Senado, Ettore Pirovano, afirmó que se trata de “un bumerán para la justicia, para los justos, para el respeto de nuestra cultura, de nuestra nación y de nuestra religión”. Pirovano recordó que Smith definió el crucifijo como “un pequeño cadáver clavado a dos trozos de madera” y dañino para los niños musulmanes que frecuentan las escuelas italianas.

“El señor Smith ha logrado salirse con la suya: llevar ante un tribunal a quien, mediante el arte de la cultura y el pensamiento occidental, se bate contra el integrismo islámico”, dijo Pirovano, quien anunció que la Liga luchará “contra este insolente procedimiento”.

Adel Smith saltó a la luz pública en 2003 al presentar un recurso para que se retirara la cruz de la escuela a la que iban sus dos hijos en la localidad de Ofena, en el centro del país. Una sentencia a su favor de un juez de primera instancia, en octubre de ese año, levantó un gran revuelo, con la protesta formal del Vaticano y la intervención del Papa.

El funcionario que debía ejecutar la resolución judicial se negó a hacerlo y la alcaldesa de Ofena cerró transitoriamente la escuela para impedir que se llevara a cabo la sentencia. El pasado 15 de diciembre el Tribunal Constitucional rechazó el recurso planteado por un tribunal administrativo regional a favor de la retirada de los crucifijos de las e

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