L D (EFE) En Madrid, tras la máxima de 37 que se registró el domingo, los termómetros volverán a rondar este lunes esa temperatura, aunque lo peor llegará por la noche, ya que en las horas centrales de la madrugada el mercurio permanecerá sobre los 24 grados.
Una situación similar se producirá en las provincias castellanomanchegas de Toledo y Ciudad Real, donde las temperaturas mínimas rondarán también los 24 grados. Además, en el caso de Toledo, la máxima prevista para este lunes llegará a los 39 ó 40 grados centígrados, según los datos facilitados por Protección, Civil, y en la provincia de Ciudad Real la máxima será algo más suave, pero los termómetros llegarán a marcar 36 grados.
Fuentes de Protección Civil ha informado de que además en Extremadura, donde las temperaturas han sido también muy elevadas durante los últimos días, las temperaturas se suavizarán la madrugada de este martes y que se da, por tanto, por finalizado el aviso en esta Comunidad.
Según el informe "Aspectos Climatológicos en relación con el exceso de temperatura" que presentó el Gobierno de cara a la campaña de verano 2005, las temperaturas mínimas elevadas incrementan la percepción de calor entre las personas tanto o más que las máximas que se alcanzan, ya que la sensación de extremo calor que se tiene durante el día no se consigue aliviar durante la noche y éstas parecen "noches tropicales".
Aumentará la mortalidad
La mortalidad causada por las olas de calor, que se apuntan como "más frecuentes en intensidad y duración en los próximos años", aumentará, según ha señalado este lunes José Manuel Moreno, catedrático de Ecología y director del Departamento de Ciencias Ambientales de la Universidad de Castilla-La Mancha.
También es previsible un aumento de enfermedades transmitidas por mosquitos (dengue o malaria) o por garrapatas (encefalitis), así como un agravamiento de los problemas de salud causados por las altas concentraciones de contaminación en la atmósfera.