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Quince personas detenidas en una operación policial contra la mayor red de phishing española

La Guardia Civil y la Policía detuvieron a 15 personas, de varias nacionalidades, en España y Argentina, y entre ellas a un español considerado el mayor estafador de la banca on-line, al haber logrado con este delito varios millones de euros. Según un comunicado del Ministerio del Interior, esta persona, el español más buscado por phishing, (duplicar una página web, normalmente de bancos, con fines delictivos), que podría ser el autor de las mayores estafas realizadas últimamente en España por este procedimiento, fue detenido en Argentina.

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La Guardia Civil y la Policía detuvieron a 15 personas, de varias nacionalidades, en España y Argentina, y entre ellas a un español considerado el mayor estafador de la banca on-line, al haber logrado con este delito varios millones de euros. Según un comunicado del Ministerio del Interior, esta persona, el español más buscado por phishing, (duplicar una página web, normalmente de bancos, con fines delictivos), que podría ser el autor de las mayores estafas realizadas últimamente en España por este procedimiento, fue detenido en Argentina.
L D (EFE) El comunicado de Interior añade que la Guardia Civil y Cuerpo Nacional de Policía desarticularon la red de phishing más importante a nivel nacional, en la operación denominada "Pampa-Tasmania", desarrollada en Madrid, Barcelona, Palencia, Valencia y la ciudad argentina de Santa Fe.

La operación se saldó, hasta este momento, con la detención de 15 personas de nacionalidades española, rumana, ecuatoriana, argentina e italiana. Además, se practicaron nueve registros domiciliarios en los que se incautaron gran cantidad de material informático y documentación, y se investigaron más de 8.000 registros telefónicos y 150 cuentas corrientes.

Las investigaciones se iniciaron a principios de año cuando la Guardia Civil y la Policía tuvieron conocimiento a través de las denuncias presentadas por varias entidades bancarias de estafas que llevaban a cabo varias personas a través de Internet. Tras las primeras investigaciones se determinó que las personas investigadas actuaban coordinadamente y sobre ellas pesaban órdenes internacionales de busca y detención, por lo que se continuó con la operación conjuntamente.

Uno de los principales responsables de la red desarticulada es J.M.G.R., español de 23 años y conocido policialmente como "Tasmania", sobre el que pesaban un total de 14 órdenes judiciales de busca y detención, 7 de las cuales implicaban su búsqueda internacional e inmediato ingreso en prisión, por lo que huyó del país y se refugió en Argentina, donde fue detenido por Interpol. Otro de los cabecillas es A.A.P., rumano de 24 años, técnico superior informático, galardonado con más de 138 diplomas, que ya ha ingresado en prisión por estos hechos.

Los dos cabecillas actuaban coordinadamente y eran capaces de obtener las claves secretas de los usuarios de Internet mediante virus informáticos en forma de "troyanos" o "gusanos", o bien, con la remisión masiva de correos en los que se hacían pasar por entidades bancarias con el fin de que los usuarios facilitasen sus claves. Mediante este último sistema, exigían a través de un formulario las claves secretas a los usuarios por medidas de seguridad y advirtiéndoles de que de lo contrario se bloquearían sus cuentas bancarias. Una vez introducidas en el formulario, el cliente, convertido en víctima del engaño, las enviaba a los integrantes de la red, los cuales, accedían a sus ahorros y los transferían a numerosas cuentas bancarias abiertas con identidades falsas o usurpadas.

Una parte de esos ingresos se repartía entre los integrantes de esta organización, mientras que el resto era utilizado en la compra de material informático y de telefonía móvil, para su venta en el mercado negro, o a la mejora de los sistemas utilizados en estos ataques. Gracias a sus conocimientos en informática, utilizaban servidores ubicados en lugares tan dispares como Argentina, Tailandia, Canadá, Holanda o Rusia, con el fin de no ser detectados por las fuerzas de seguridad.

Asimismo, llegaron a dedicar sus ingresos a otro tipo de actividades delictivas, por lo que se ha desarticulado también en Barcelona un punto de venta de hachís, éxtasis y cocaína, sustancia esta última de la que se encontraron 2.000 dosis en uno de los registros practicados. En las investigaciones intervinieron agentes del Grupo de Investigación de Delitos Telemáticos de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil y de la Comandancia de Cáceres, así como de la Brigada de Investigación Tecnológica del Cuerpo Nacional de Policía. Las actuaciones policiales fueron dirigidas por el Juzgado de Instrucción número 3 de Alcalá de Henares, a cuya disposición pasarán los detenidos.

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