L D (EFE) La portavoz de ERC, Marina Llansana, ha pedido a todos partidos un esfuerzo de negociación para poder cumplir los plazos del calendario de aprobación del Estatut, aunque Esquerra acepta que el pleno previsto para finales de septiembre pueda retrasarse si con ello es posible lograr el consenso. Según la portavoz de ERC, será necesario seguir negociando si se mantienen las discrepancias sobre el contenido del Estatut, y ha admitido que éstas pueden perjudicar al gobierno catalán si no se consigue la mayoría suficiente para aprobarlo, aunque "ahora no es el momento de pensar en elecciones anticipadas porque seguimos creyendo que aún es posible tener un buen Estatut".
Llansana ha confirmado, en rueda de prensa, que en lo que va de mes de agosto no ha habido ni un sólo contacto entre líderes políticos para tratar de desencallar las cuestiones que dificultan la aprobación del Estatut, aunque "es muy posible que a partir del día 16 sí que empiece a haberlos".
También ha indicado que ERC "trabaja en la hipótesis del calendario que está fijado pero, si llegado el momento, entre todos no hemos sido capaces de desbloquear la situación, estaríamos a favor de que el pleno se posponga una o dos semanas como máximo para encontrar el consenso necesario". "Esto es algo de sentido común", ha añadido.
Llansana ha explicado que a diferencia del PSC, que tiene previsto celebrar el próximo sábado una mini-cumbre de Maragall con los consellers socialistas que veranean en el Ampurdán, ERC no ha convocado ninguna reunión de ejecutiva ya que sus dirigentes siguen de vacaciones en distintos lugares. Según dicha portavoz, "resulta lamentable que algunos representantes del PSC estén culpando a ERC de poner en peligro el tripartito cuando nuestro partido ha sido absolutamente leal al gobierno en el acuerdo sobre la financiación y lo ha defendido hasta la última coma".
También ha indicado que ERC "trabaja en la hipótesis del calendario que está fijado pero, si llegado el momento, entre todos no hemos sido capaces de desbloquear la situación, estaríamos a favor de que el pleno se posponga una o dos semanas como máximo para encontrar el consenso necesario". "Esto es algo de sentido común", ha añadido.
Llansana ha explicado que a diferencia del PSC, que tiene previsto celebrar el próximo sábado una mini-cumbre de Maragall con los consellers socialistas que veranean en el Ampurdán, ERC no ha convocado ninguna reunión de ejecutiva ya que sus dirigentes siguen de vacaciones en distintos lugares. Según dicha portavoz, "resulta lamentable que algunos representantes del PSC estén culpando a ERC de poner en peligro el tripartito cuando nuestro partido ha sido absolutamente leal al gobierno en el acuerdo sobre la financiación y lo ha defendido hasta la última coma".
ERC votará los presupuestos si Zapatero es leal al Estatuto catalán
"Respecto a todo lo demás -ha recordado-, no existe un acuerdo previo con el PSC o con el resto de formaciones, por lo que nosotros actuamos en coherencia con nuestros posicionamientos, y cada partido ha defendido los suyos, puesto que el Estatut lo hace el Parlament, no el gobierno catalán", ha dicho Llansana.
"Respecto a todo lo demás -ha recordado-, no existe un acuerdo previo con el PSC o con el resto de formaciones, por lo que nosotros actuamos en coherencia con nuestros posicionamientos, y cada partido ha defendido los suyos, puesto que el Estatut lo hace el Parlament, no el gobierno catalán", ha dicho Llansana.
Respecto a la posibilidad de que el Gobierno central busque nuevas alianzas en el Congreso para aprobar los Presupuestos, Marina Llansana ha indicado que ERC no mantiene "ninguna exclusividad de pactos con el PSOE", por lo que éste "es libre de intentar ampliar las mayorías". Sobre los Presupuestos para 2006, ha precisado que ERC decidirá su voto "en primer lugar, en función del contenido de los mismos" y, "en segundo lugar, en virtud de que el presidente Zapatero sea leal al compromiso de respetar el texto del Estatut decidido por el Parlamento catalán".
Según Llansana, a ERC no le sorprende el rechazo que ha provocado en el PP y el PSOE su propuesta de reforma de la Constitución, en la que se apuesta por un Estado federal plurinacional y se propugna el derecho a la secesión de las naciones y nacionalidades. "Sabemos que algunas de nuestras iniciativas ponen los pelos de punta a más de uno -ha afirmado-, pero no por eso vamos a dejar de plantear los debates que creemos necesarios, y creemos que hay que hacer una reforma valiente de la Constitución para adaptarla a los nuevos tiempos y no unos simples retoques