L D (EFE) El premio fue especial para el español. Se trataba de la conquista de la etapa reina de la Vuelta, la primera en Los Pirineos, y en el techo de la prueba (2.220 metros), donde sucedió en el palmarés a su fallecido paisano José María Jiménez, "el Chaba". Tantas emociones llegaron después de un apretado esprint de cinco corredores, todos escaladores, en el que el madrileño afincado en Navaluenga (Avila) fue el más inteligente para cruzar la raya en cabeza por delante de Roberto Heras (Liberty) y Denis Menchov (Rabobank), enfrascados en su lucha mano a mano, los tres con un tiempo de 5h.33.49.
"La pena es que con la tensión del esprint se me ha olvidado dedicarle la victoria a mi hija", se lamentó Mancebo, que correrá la próxima temporada en el Ag2r francés después de toda la vida junto a Echávarri y Unzue, con los que ha conseguido 11 victorias y 6 puestos entre los diez primeros en el Tour, lo que le convierten el ciclista español más regular en la prueba francesa desde la retirada de Indurain.
A dos segundos de Mancebo cruzaba la meta su compatriota Carlos García Quesada (C.Valenciana) y a seis el también español Juan Miguel Mercado (Quick Step), cuarto y quinto, respectivamente. Fuera de la pelea en la cumbre entraron Manuel Beltrán (Discovery) y Rubén Plaza a 16 segundos (C.Valenciana) y Carlos Sastre (CSC) a 21.
La fiesta en el Illes Balears no puso ser completa, pues Aitor Osa se fracturó la clavícula tras sufrir una caída en el descenso del Coll de Montaup, cuando marchaba escapado con Carlos García Quesada y el belga Verbrugghe. Una retirada que se unía, entre otras, a las de Angel Casero, ganador en 2000 e Isidro Nozal, segundo en 2003.
"La pena es que con la tensión del esprint se me ha olvidado dedicarle la victoria a mi hija", se lamentó Mancebo, que correrá la próxima temporada en el Ag2r francés después de toda la vida junto a Echávarri y Unzue, con los que ha conseguido 11 victorias y 6 puestos entre los diez primeros en el Tour, lo que le convierten el ciclista español más regular en la prueba francesa desde la retirada de Indurain.
A dos segundos de Mancebo cruzaba la meta su compatriota Carlos García Quesada (C.Valenciana) y a seis el también español Juan Miguel Mercado (Quick Step), cuarto y quinto, respectivamente. Fuera de la pelea en la cumbre entraron Manuel Beltrán (Discovery) y Rubén Plaza a 16 segundos (C.Valenciana) y Carlos Sastre (CSC) a 21.
La fiesta en el Illes Balears no puso ser completa, pues Aitor Osa se fracturó la clavícula tras sufrir una caída en el descenso del Coll de Montaup, cuando marchaba escapado con Carlos García Quesada y el belga Verbrugghe. Una retirada que se unía, entre otras, a las de Angel Casero, ganador en 2000 e Isidro Nozal, segundo en 2003.
Menchov ya es un serio candidato a ganar la Vuelta
Denis Menchov salió reforzado como serio candidato a la Vuelta. Resistió, sin equipo, los ataques de Heras, en el terreno del bejarano, que vio como en hasta en tres ocasiones no había manera de repetir la jugada de Valdelinares. El ruso le ganó el segundo asalto consecutivo al favorito número 1 tras el repaso en la contrarreloj de Lloret. El duelo gana en interés porque solo valdrá el ciclismo de ataque para apear de la cúspide al jefe de filas del Rabobank. La general mantuvo intacto a Menchov con 47 segundos de colchón respecto a Heras. Mancebo pasó al tercer cajón del podio provisional a 1.53 y dejó a Sastre el cuarto a 1.57. Carlos García Quesada se puso quinto a 3.31. Rubén Plaza (7o), Manuel Beltrán (8o) y Juanmi Mercado (9o), son el resto de españoles entre los diez primeros.
La etapa fue movida desde el principio. En el kilómetro 10 ya se había formado una numerosa escapada con Martín Perdiguero, Joaquín Rodríguez, David López, Oscar Pereiro, Eladio Jiménez y Adolfo García Quesada entre los expedicionarios. Por detrás se sucedían los intentos por enlazar, y los favoritos siempre bajo el control del Liberty. La fuga quedó controlada cuando el retraso del gran grupo superaba los 4.50 minutos, pero siempre hubo voluntarios para intentar la aventura. Aitor Osa, Carlos García Quesada y el belga Verbrugghe se marcharon en el ascenso al Coll de Montaup en perfecta armonía. Coronaron juntos, pero la desgracia le espero al corredor del Balears en la bajada.
A 10 kilómetros de la meta Juan Miguel Mercado y Carlos García Quesada trataron de escalar hacia la gloria con la parte más difícil del puerto por delante, pero los jefes ya habían desatado las hostilidades. Atacó Mancebo, luego Heras en tres ocasiones, Menchov capeaba el temporal y entre ataque y ataque se formó en cabeza el quinteto que se iba a jugar la etapa.
En un esprint de escaladores quedaba el "pelotazo" de ganar en el techo de la Vuelta. Saltó Heras, se le pegó como una lapa Menchov, pero Mancebo se había transformado en Petacchi y los pasó como una exhalación. Ya tenía su etapa soñada y una bonita historia para contar a Paula, "la victoria más importante" de su vida.
La undécima etapa de la Vuelta y la segunda de los Pirineos presenta el tercer final en alto y un total de 5 puertos entre Andorra y Cerler, con un recorrido de 186,6 kms. El Port de Cantó (1a), el Coll de Bretui, La Creu de Perves y La Espina, los tres de 2a y el ascenso final a Cerler (especial), hacen de la la jornada una cita que puede marcar el futuro de la carrera, pues los favoritos se volverán a ver las caras
La etapa fue movida desde el principio. En el kilómetro 10 ya se había formado una numerosa escapada con Martín Perdiguero, Joaquín Rodríguez, David López, Oscar Pereiro, Eladio Jiménez y Adolfo García Quesada entre los expedicionarios. Por detrás se sucedían los intentos por enlazar, y los favoritos siempre bajo el control del Liberty. La fuga quedó controlada cuando el retraso del gran grupo superaba los 4.50 minutos, pero siempre hubo voluntarios para intentar la aventura. Aitor Osa, Carlos García Quesada y el belga Verbrugghe se marcharon en el ascenso al Coll de Montaup en perfecta armonía. Coronaron juntos, pero la desgracia le espero al corredor del Balears en la bajada.
A 10 kilómetros de la meta Juan Miguel Mercado y Carlos García Quesada trataron de escalar hacia la gloria con la parte más difícil del puerto por delante, pero los jefes ya habían desatado las hostilidades. Atacó Mancebo, luego Heras en tres ocasiones, Menchov capeaba el temporal y entre ataque y ataque se formó en cabeza el quinteto que se iba a jugar la etapa.
En un esprint de escaladores quedaba el "pelotazo" de ganar en el techo de la Vuelta. Saltó Heras, se le pegó como una lapa Menchov, pero Mancebo se había transformado en Petacchi y los pasó como una exhalación. Ya tenía su etapa soñada y una bonita historia para contar a Paula, "la victoria más importante" de su vida.
La undécima etapa de la Vuelta y la segunda de los Pirineos presenta el tercer final en alto y un total de 5 puertos entre Andorra y Cerler, con un recorrido de 186,6 kms. El Port de Cantó (1a), el Coll de Bretui, La Creu de Perves y La Espina, los tres de 2a y el ascenso final a Cerler (especial), hacen de la la jornada una cita que puede marcar el futuro de la carrera, pues los favoritos se volverán a ver las caras