(Libertad Digital) El presidente del PP, Mariano Rajoy , en declaraciones a La Mañana de la COPE , ha lamentado "que no haya espíritu crítico" en la sociedad catalana y "que no se exijan responsabilidades" por las consecuencias que está teniendo todo lo que rodea a la reforma del Estatuto.
El líder popular dijo que "llevan dos años de espectáculo con el Estatuto" y señaló que "mientras tanto, el Gobierno catalán no gobierna, todo es Estatuto". Según Mariano Rajoy, José Luis Rodríguez Zapatero y Pascual Maragall a estas alturas "quieren el Estatuto que sea, el contenido del Estatuto les importa un comino" y "de lo que se trata es de salir del lío que ellos mismos se han creado".
El máximo responsable del PP terminó este apartado diciendo que "el Estatuto que están presentando va contra la existencia de un Estado viable" y recordó que así lo ha reconocido el propio Consejo Consultivo de Cataluña, que ha incluido una veintena de artículos inconstitucionales y que está formado en su mayoría por "representantes nacionalistas". Al final dejó claro: "Yo no puedo aprobar ese Estatuto, es ridículo".
Reunión Zapatero-Rajoy
Al respecto de la reunión mantenida con el presidente del Gobierno, Rajoy reconoció que "no pasó nada, no me dijo nada nuevo excepto la necesidad de dialogar", algo ante lo cual el líder de la oposición añadió que "no hace falta tanto diálogo ni tanto talante", sino que "los españoles lo que quieren son criterios concretos sobre los problemas que les importan".
En este sentido, Mariano Rajoy criticó que "el Gobierno haya decidido pactar todo, incluso contra el PP" y recordó que el PSOE ha roto con la tradición que ha habido en este país en los últimos años y es que "no hay nada importante que no haya sido pactado por los dos grandes partidos de España". Sin embargo, dijo, "prefiere pactar con partidos a los que esto (España) no les importa nada".
Financiación sanitaria
Rajoy criticó la poca seriedad de este Gobierno y puso como ejemplo la financiación sanitaria. El presidente de los populares recordó que en el año 2001 todas las comunidades autónomas, incluida la Generalidad de Cataluña, se pusieron de acuerdo en un modelo de financiación y que cuando en el 2004 gana Zapatero, el tripartito entonces dice que "no le gusta este modelo de financiación y que hay que cambiarlo, pero como no saben lo que hay que hacer está un año mareando la perdiz".
El líder de la oposición destacó que como no saben al final que es lo que hay que hacerdicen: "vamos a plantear una cosa transitoria para dos años", que consiste en que "le dan cinco duros a las autonomías y a cambio suben el impuesto del tabaco y del alcohol, que por lo visto son de derechas, el impuesto de la electricidad y el de la gasolina".
Rajoy lamenta que "le dan la posibilidad de hacer el doble céntimo sanitario en el año que más han subido la gasolina y los gasóleos", y por ello espera que "esta cosa tan disparatada, tan ridícula, tan improvisada y tan excéntrica" se rectifique porque "así no se puede gobernar, esto no es serio".
Sin cambios
El presidente del PP volvió a expresar su "pleno apoyo" al líder de los populares en Cataluña, Josep Piqué, al tiempo que precisó que no cambiará en sus puestos ni al secretario general del partido, Ángel Acebes, ni al portavoz en el Congreso, Eduardo Zaplana, tras el debate abierto después de que Piqué pidiera en su momento un cambio de "caras" en esta formación política.
Rajoy dejó claro que el presidente del PP catalán "lo está haciendo muy bien" y recordó además que Piqué está incorporado a los órganos de dirección del partido. Así, aprovechó para puntualizar que el PP "no tiene ningún problema" y que se debería hablar de "por qué no cambian a San Segundo o Moratinos o a tanto personal variopinto".
Para Rajoy ese debate está zanjado, "no voy a hacer ningún cambio; estoy contento y satisfecho y sé lo que tengo que hacer para ganar las próximas elecciones". Concluyó que la posición del PP es muy conocida: "Nosotros creemos en el hombre, en su libertad; es el valor básico que defendemos y lo compatibilizamos con un sistema de bienestar, y yo no voy a hacer genialidades para que digan que soy centrista o menos centrista, porque es un debate absurdo".