L D (EFE) España comenzó enchufada al partido, lo que posibilitó que comenzara con ventaja (6-0). No obstante, Croacia fue sintiéndose cada vez más cómoda sobre la cancha y se puso por primera vez por delante en el electrónico a los siete minutos (11-12). Sergi Vidal levantó por primera vez al público de sus asientos con un espectacular mate (16-12) tras una buena recuperación de la defensa española, que se situó en zona durante muchas fases del choque.
El equipo de Mario Pesquera finalizó el primer cuarto con una mínima renta (18-17), aunque los balcánicos iniciaron el segundo acto con la misma fuerza con la que comenzó España el partido (19-25). El seleccionador nacional tuvo que parar el duelo porque la ventaja no decrecía (26-31) y el tiempo muerto dio resultado. En sólo unos segundos, cuatro puntos de Vázquez, taponazo del pívot del Akasvayu Girona y otro triple de Iturbe. 33-33 y vuelta a empezar. La igualdad se mantuvo hasta el descanso, al que se llegó con una mínima diferencia a favor de los croatas (39-40).
La selección española volvió a salir con su quinteto de lujo en el tercer cuarto. Y de nuevo su arranque fue mejor que el de los balcánicos (48-43), aunque los croatas son capaces de anotar desde cualquier sitio y ponerse de nuevo por delante en el marcador en un abrir y cerrar de ojos (50-51). Pero España tampoco anda falta de calidad. Por eso, el tercer período fue intenso y duro, y apenas hubo tregua entre los contendientes. Una técnica señalada a Felipe Reyes, por protestar, ayudó a que Croacia estirara el marcador al conseguir un parcial de 1-10 (55-62). La garra de Iñaki de Miguel y los continuos ánimos de la afición granadina permitieron al equipo nacional llegar vivo al cuarto definitivo (62-66).
Pesquera recurrió entonces a Garbajosa, que sólo había jugado ocho minutos hasta entonces. El intercambio de canastas fue continuo hasta que una 'bomba' de Navarro puso de nuevo a España por delante (73-72). El final de partido fue idéntico al disputado sólo 48 horas antes en Córdoba por ambos equipos. La única diferencia fue que España no falló. Esta vez entraron los tiros libres y no hubo prórroga. Granada es talismán para la selección, que mira con un poco más de optimismo al Europeo de Serbia.