L D (EFE) Según las últimas encuestas, un 25 por ciento de los electores todavía no tiene claro a quien votará este domingo y la ventaja que llegó a tener la oposición en los sondeos de hace unas semanas se ha visto disminuida considerablemente. La Unión Cristianodemócrata (CDU), de Angela Merkel, sigue siendo vista como el partido más fuerte con una intención de voto de entre el 41 y el 43 por ciento, pero no está claro si ese resultado le alcanzará para gobernar con su potencial socio de coalición, el Partido Liberal (FDP).
En vista de ello, todos los partidos han optado por seguir la lucha hasta el final rompiendo con una ley no escrita —en Alemania no existe la figura legal de la jornada de reflexión— según la cual la campaña terminaba el viernes anterior a las elecciones.
Tanto Schroeder como Merkel participaron en la mañana de este sábado en actos electorales en el estado federado de Renania del Norte de Westfalia: el canciller habló en Recklinghausen y la candidata en Bonn. La candidata de la oposición reiteró su acusación contra el canciller de estar haciendo una campaña para crear pánico ante la posibilidad de un cambio de Gobierno.
Además, rechazó la idea repetida constantemente por Schroeder de que ella y su partido quieren poner fin a la economía social de mercado. La candidata cristianodemócrata dijo que sus planes de reformas están dirigidos precisamente a mantener la economía social de mercado mientras que el Partido Socialdemócrata está vacío de conceptos hacia el futuro.
En vista de ello, todos los partidos han optado por seguir la lucha hasta el final rompiendo con una ley no escrita —en Alemania no existe la figura legal de la jornada de reflexión— según la cual la campaña terminaba el viernes anterior a las elecciones.
Tanto Schroeder como Merkel participaron en la mañana de este sábado en actos electorales en el estado federado de Renania del Norte de Westfalia: el canciller habló en Recklinghausen y la candidata en Bonn. La candidata de la oposición reiteró su acusación contra el canciller de estar haciendo una campaña para crear pánico ante la posibilidad de un cambio de Gobierno.
Además, rechazó la idea repetida constantemente por Schroeder de que ella y su partido quieren poner fin a la economía social de mercado. La candidata cristianodemócrata dijo que sus planes de reformas están dirigidos precisamente a mantener la economía social de mercado mientras que el Partido Socialdemócrata está vacío de conceptos hacia el futuro.