L D (EFE) La delegación, formada por José Miguel Barragán, de CC; Teresa Morales, del PSC-PSOE; y Celso Betancor, del PIL, regresó a la isla, según Morales, "decepcionada con la actitud de las autoridades marroquíes y preocupada por los 38 representantes de ONG que secundan una huelga de hambre desde el 8 de agosto para protestar por la situación de los presos en las cárceles" del reino alauí.
Para ello, informaron de su visita tanto a las autoridades marroquíes, a través del consulado en Canarias, como al Ministerio de Asuntos Exteriores español. A su llegada al aeropuerto de El Aaiún, los tres parlamentarios, que no pudieron bajar del avión como sí hicieron el resto de los pasajeros, fueron informados por un grupo de personas que dijeron representar a la Gendarmería marroquí de que "no eran bien recibidos", según informó a Efe desde el interior del avión Teresa Morales.
Por este motivo, a las 18.00 horas, la delegación canaria voló de regreso a Gran Canaria convirtiéndose así en la séptima a la que se niega la entrada en la antigua colonia española en los últimos meses. A su llegada a la isla, Morales informó de que el grupo propondrá a las autoridades marroquíes un nuevo viaje, a celebrar en octubre o en noviembre, y confió en que la nueva iniciativa obtenga resultados ya que, "si no hay nada que ocultar, no hay motivos para impedir la entrada a unos observadores". El último grupo de parlamentarios que intentó la entrada, el pasado 7 de septiembre, lo formaron diputados regionales y representantes sociales de Navarra.
El viaje de la delegación canaria es el primero que se organiza a El Aaiún después de que ayer el pleno del Congreso de los Diputados aprobara por unanimidad una moción de NC, uno de los dos partidos que forman el grupo parlamentario de los nacionalistas canarios, en la que se insta al Gobierno a que exprese su rechazo por las medidas represivas de Marruecos en el Sahara Occidental.