L D (Europa Press) Espinosa hizo un llamamiento a la tranquilidad e indicó que se han tomado todas las precauciones necesarias para que se pueda consumir pollo y aves con tranquilidad. También quiso aclarar que si la pandemia llega a España, se tendrán que sacrificar las aves, pero insistió que no sería una causa de peligro para las personas. La ministra recordó que no existen casos en los que la enfermedad se transmita de humano a humano no por consumir carne de ave o pollo, sino que la "única forma es la convivencia continua y permanente con estos animales".
En concreto, Elena Espinosa explicó que en las explotaciones de los países con problemas existe una convivencia directa con las aves, algo que no sucede en España. En cualquier caso, manifestó que desde el Ministerio se han extremado las precauciones y se ha reforzado el plan de choque contra la influencia aviar que funciona desde el año 2003.
De esta manera, según Espinosa, se ha prohibido la importación de aves de países con focos de enfermedad, tanto de animales como de productos transformados y también de plumas; se han extremado las precauciones en los pasos fronterizos; se ha alertado a las sociedades de caza que pongan en conocimiento de la Administración cualquier indicio; se han duplicado el número de pruebas que se realizan a las aves y se ha adquirido un mayor número de dosis de vacunación para los animales.
La ministra de Agricultura realizó estas declaraciones en la localidad burgalesa de Aranda de Duero, donde visitó las instalaciones del Grupo Leche Pascual.