La Juventus golea al Lecce a domicilio mientras la Roma y el Lazio se reparten los puntos en el derbi

L D (EFE) En Milán se registró la buena nueva del regreso al gol de Filippo Inzaghi, que parece haber dejado atrás los casi dos años de lesión que le han dejado casi al borde de la retirada y que este domingo, saliendo como titular de inicio, dio un importante triunfo casero al Milán sobre el Palermo. Filippo Inzaghi, que no anotaba desde el 7 de marzo de 2004 -más de 19 meses-, anotó el 2-1 (m.76) a "su estilo" de "ladrón de área": ganando la espalda al rival y tirándose de cabeza a un centro pasado del checo Jankulovsk, otro recuperado para el fútbol tras una grave lesión.

Hasta entonces, el partido era dominado en juego por el Milán, que se estrellaba ante la buena contención palermitana, pero equilibrado en goles. El Palermo se le estaba atragantando al conjunto milanista y fue, además, el primero en tener ocasión de anotar con un remate de cabeza del argentino Santana al larguero (m.6). Además, se puso por delante con un tanto de Caracciolo (m.28). Pero el Milán pronto encontró el empate con un gol de Gattuso (m.30) desde luego nada fiel a su estilo "rudo", pues lo hizo con una hábil volea. En la segunda mitad el Milán se volcó con todo, salieron al campo Pirlo, Seedorf y Vieri; pero fue Inzaghi quien le dio un importante triunfo, que le sigue manteniendo a cinco puntos del Juventus.

Un Juventus, con el francés David Trezeguet en el banquillo, que se paseó en Lecce y ya enderezó su triunfo con un gol temprano de Zlatan Ibrahimovic (m.9). Luego, se limitó a controlar y a machacar cuando quiso al final: Adrián Mutu (m.80) y Marcelo Zalayeta (m.94). El Inter se presentó en casa del Udinese -otro de los equipos en liza en la Liga de Campeones- con la que se decía una "crisis casi abierta": derrota en Oporto y presunto "caso Adriano", ya que a su retraso en incorporarse la pasada semana se unía lo que se apunta una separación de su novia. El partido de Adriano duró sólo media hora, mejor dicho quince minutos. Y es que al cumplirse el primer cuarto de hora sufrió un fuerte golpe en el hombro derecho y, pese a volver al campo con un fuerte vendaje, se retiró quince minutos después. Curiosamente, fue la fortuna del Inter. Le sustituyó el argentino Julio Cruz y el denominado "Jardinero" anotó el tanto del triunfo interista (m.36).

El Chievo Verona, que jugaba mejor fuera que en casa, rompió con su triunfo ante el Cagliari (2-1, con inútil gol visitante al final del hondureño David Suazo) una negativa racha que le venía no ganar en su terreno desde el 11 de septiembre. En el Livorno, un gol al final del de siempre, Cristiano Lucarelli (m.88), dio el triunfo a los locales ante el Reggina (1-0), pese a que los livorneses jugaron en diez desde la media hora por expulsión de su jugador Morrone.

El Sampdoria salvó "in extremis" un punto en casa ante el Siena (3-3), pues logró el tanto del empate final en el minuto 94 y de penalti. Curiosamente, de los seis tantos, tres fueron de pena máxima (dos sampdorianas y una sienesa). El colista Treviso sigue, como Messina y Cagliari, sin ganar. Este domingo, además, cayó en casa ante el Émpoli (1-2), uno de sus teóricos rivales por la salvación de la categoría, con gol inicial del argentino en las filas visitante Sergio Bernardo Almirón (m.24).