LD (EFE) La encuesta revela que tan sólo el 8,4 por ciento de los españoles considera que el acceso a una vivienda hoy en día es mejor que en 2002, y el 16,8 por ciento asegura que las posibilidades no han cambiado. En cuanto a los tres principales problemas que existen actualmente en España, el 24,5 por ciento de los encuestados cita a la vivienda, que ocupa en el ránking global el cuarto puesto, por detrás del paro (el 55,7 por ciento), el terrorismo y ETA (35,9 por ciento) y la inmigración (32,8 por ciento).
Del total de los consultados, el 50,9 por ciento posee una vivienda en propiedad ya totalmente pagada, mientras que los que tienen pagos pendientes alcanzan el 23,5 por ciento, y como media les faltan 15,17 años para terminar de financiar su casa, con una cuota mensual de la hipoteca que asciende a 466,56 euros.
En alquiler vive el 11,6 por ciento de los encuestados, que pagan como media una renta mensual de 356,87 euros. Casi la mitad de los consultados, el 49,7 por ciento, vive en alquiler porque no puede hacer frente al pago de una vivienda en propiedad y el 19,1 por ciento contesta que es una situación provisional hasta que pueda adquirir un piso. El 80,9 por ciento de las casas alquiladas a los encuestados pertenece a un particular, el 4,9 por ciento a una institución o empresa y el 8,7 por ciento a la Administración Pública.
Para poder comprar o alquilar la casa en la que viven los españoles, el 52,7 por ciento ha tenido que pedir créditos, aunque el 63,2 por ciento ha contado con ahorros propios y el 47,2 por ciento con recursos de su pareja y el 21,6 por ciento con la ayuda económica de familiares. El 14 por ciento ha necesitado avales y tan sólo el 7,4 por ciento ha recibido apoyo de la Administración, que ha consistido, en el 56,7 por ciento de los casos, en una vivienda de protección oficial y en el 23,6 por ciento en la obtención de préstamos a través de bancos o cajas a un interés menor del normal.
El 60,4 por ciento de los españoles no conoce las ayudas que existen para la adquisición de una vivienda, y tan sólo el 39 por ciento sí las conoce, a pesar de que el 89,9 por ciento de los consultados preferiría tener una vivienda en propiedad –y tan sólo el 8,7 por ciento optaría por el alquiler–. En el primer caso, los españoles citan como principal razón la de querer tener su propia casa (52,5 por ciento), seguida del motivo de que los alquileres son caros y con un esfuerzo adicional pueden hacerse con su propia vivienda (38,7 por ciento).
En el segundo caso, los que prefieren el alquiler, el 62 por ciento asegura que es porque no puede hacer frente al pago de un piso en propiedad, y el 12 por ciento dice que es porque prevé un traslado por los estudios. En este sentido, el 19,2 por ciento de los encuestados tiene intención de residir en una vivienda distinta a la actual en los próximos tres años porque en el 33,3 por ciento de los casos desean independizarse y tener una vivienda propia, y en el 17,2 por ciento esperan casarse o irse a vivir en pareja. Por contra, el 77 por ciento no pretende trasladarse a otra casa hasta 2008.
En general, los españoles destinan como media el 25,3 por ciento de los gastos que hay en su hogar a la vivienda, y conceden una puntuación de 8,65 sobre 10 a la vivienda en cuanto a la importancia que tiene en su vida. El barómetro del CIS de septiembre está basado en 2.487 entrevistas a españoles de ambos sexos y mayores de dieciocho años.
Del total de los consultados, el 50,9 por ciento posee una vivienda en propiedad ya totalmente pagada, mientras que los que tienen pagos pendientes alcanzan el 23,5 por ciento, y como media les faltan 15,17 años para terminar de financiar su casa, con una cuota mensual de la hipoteca que asciende a 466,56 euros.
En alquiler vive el 11,6 por ciento de los encuestados, que pagan como media una renta mensual de 356,87 euros. Casi la mitad de los consultados, el 49,7 por ciento, vive en alquiler porque no puede hacer frente al pago de una vivienda en propiedad y el 19,1 por ciento contesta que es una situación provisional hasta que pueda adquirir un piso. El 80,9 por ciento de las casas alquiladas a los encuestados pertenece a un particular, el 4,9 por ciento a una institución o empresa y el 8,7 por ciento a la Administración Pública.
Para poder comprar o alquilar la casa en la que viven los españoles, el 52,7 por ciento ha tenido que pedir créditos, aunque el 63,2 por ciento ha contado con ahorros propios y el 47,2 por ciento con recursos de su pareja y el 21,6 por ciento con la ayuda económica de familiares. El 14 por ciento ha necesitado avales y tan sólo el 7,4 por ciento ha recibido apoyo de la Administración, que ha consistido, en el 56,7 por ciento de los casos, en una vivienda de protección oficial y en el 23,6 por ciento en la obtención de préstamos a través de bancos o cajas a un interés menor del normal.
El 60,4 por ciento de los españoles no conoce las ayudas que existen para la adquisición de una vivienda, y tan sólo el 39 por ciento sí las conoce, a pesar de que el 89,9 por ciento de los consultados preferiría tener una vivienda en propiedad –y tan sólo el 8,7 por ciento optaría por el alquiler–. En el primer caso, los españoles citan como principal razón la de querer tener su propia casa (52,5 por ciento), seguida del motivo de que los alquileres son caros y con un esfuerzo adicional pueden hacerse con su propia vivienda (38,7 por ciento).
En el segundo caso, los que prefieren el alquiler, el 62 por ciento asegura que es porque no puede hacer frente al pago de un piso en propiedad, y el 12 por ciento dice que es porque prevé un traslado por los estudios. En este sentido, el 19,2 por ciento de los encuestados tiene intención de residir en una vivienda distinta a la actual en los próximos tres años porque en el 33,3 por ciento de los casos desean independizarse y tener una vivienda propia, y en el 17,2 por ciento esperan casarse o irse a vivir en pareja. Por contra, el 77 por ciento no pretende trasladarse a otra casa hasta 2008.
En general, los españoles destinan como media el 25,3 por ciento de los gastos que hay en su hogar a la vivienda, y conceden una puntuación de 8,65 sobre 10 a la vivienda en cuanto a la importancia que tiene en su vida. El barómetro del CIS de septiembre está basado en 2.487 entrevistas a españoles de ambos sexos y mayores de dieciocho años.