L D (Europa Press) "No podemos entrar en esos detallitos, en esas cosillas que son insignificantes de cómo se titula, que tal y que cual. Sentémonos en esa mesa representativa como es el Parlamento y mirémonos a la cara, hablemos y vayamos viendo qué es lo que se quiere aportar", dijo en una entrevista a Onda Vasca, recogida por Europa Press. A su entender, es necesario tener la "voluntad inequívoca" de querer hacer aportaciones a ese foro "y no a capitalizar, por tanto, no aireemos quizá determinadas conversaciones o matizaciones que se hicieron en esa mesa, caminemos hacia delante".
Según afirmó Atutxa, en ocasiones, se "lanza a los cuatro vientos el mensaje de que las víctimas tienen que ser reconocidas, lo cual suscribo plenamente, pero les estamos haciendo un flaco favor a las víctimas con este tipo de actuaciones de que porque se llama no se qué víctimas pero no incorpora el (término) terrorismo, ya no me sirve". También recordó que algunos parlamentarios han propuesto que esta ponencia también acoja los planteamientos de las "víctimas de la guerra sucia". "Si me es igual ya, las víctimas son víctimas y punto y merecen un reconocimiento y un recuerdo y si ellas no se han sentido receptoras del calor que se merecen, algo no hemos hecho bien, por tanto, caminemos hacia delante, en la búsqueda de la solución y de un reconocimiento de quienes más han tenido que sufrir". Para Atutxa, respecto a este asunto, es necesario "dejarse de títulos y de mercantilismo o de conseguir tal o cual renta de lo que pudiera ser el debate de esta cuestión que para mí supone una verdadera tristeza".
Preguntado sobre la pacificación, Juan María Atutxa destacó la necesidad de ser "cautos" en este asunto y no "abrir expectativas que después hagan llorar a nuestros conciudadanos", así como "poner todos la mejor voluntad, con transparencia, eso sí con discreción, lo cual no significa clandestinidad ni secretismo". A su entender, hay muchas cuestiones que tienen que "quedar solamente en manos de un colectivo de representantes políticos que las tienen que seguir trabajando". En todo caso, expresó su convencimiento de que "estamos a punto de entrar en una vía que pudiera conducirnos, aunque el camino sea largo, a la consecución de la paz". "Creo que estamos en una situación que hace posible estar esperanzados", agregó.
Sobre el proyecto de Nuevo Estatuto vasco, el ex presidente de la Cámara vasca dijo que es una posibilidad "irreversible e innegable" que esta propuesta regrese al Congreso de los diputados y recordó que "abrió un cauce por el cual están discurriendo otras comunidades autónomas". "Aquello es imparable. Dimos el paso, fuimos a Madrid, sigo considerando que lo que se hizo en el Congreso fue un error porque se tenía que haber dado el primer paso y después sentarse con tranquilidad y voluntad a negociar y a limar asperezas entre ambas partes pero no se consiguió; pero eso no acaba ahí, eso volverá, no tengo la más mínima duda", manifestó.