L D (Europa Press) La ampliación del déficit por cuenta corriente se debió, principalmente, al aumento del déficit comercial y a la evolución del saldo de la balanza de rentas. Los retrocesos de los superávit de las balanzas de servicios y de transferencias corrientes también contribuyeron a este fuerte incremento.
Así, el déficit de la balanza comercial ascendió de enero a agosto a 44.680,3 millones de euros, un 39,1% más que en igual periodo del año anterior. Las exportaciones de mercancías se incrementaron un 3,1% en tasa interanual, frente a un crecimiento de las importaciones del 12,1%. Por su parte, la balanza de rentas amplió su saldo deficitario hasta 12.531,9 millones de euros, lo que supone un aumento del 41,8% sobre los ocho primeros meses de 2004.
En la balanza de servicios, el superávit acumulado descendió hasta 14.466,4 millones de euros, desde los 14.809 millones del periodo enero-agosto de 2004, como consecuencia de la reducción del superávit de la rúbrica de turismo y viajes, que disminuyó un 5,9%, hasta situarse en 17.127,2 millones de euros. La disminución del déficit de los otros servicios en un 2,3% sólo pudo compensar parcialmente la evolución del saldo de turismo y viajes, mientras que el superávit acumulado por la balanza de transferencias se redujo un 84%, hasta 187 millones de euros.
Un 95 por ciento más de necesidad de financiación
La cuenta de capital acumuló en los ocho primeros meses un superávit de 5.181,8 millones de euros, frente a los 5.838,6 millones del mismo período de 2004, debido a la disminución de los ingresos en concepto de transferencias de capital de la UE, principal partida de esta rúbrica. El saldo agregado de las cuentas corriente y de capital, es decir, la capacidad o necesidad de financiación de la economía, mostró una necesidad de financiación de 37.376,9 millones de euros en los ocho primeros meses de 2005, cifra un 95,5% superior a la registrada en igual periodo del año pasado (19.121,4 millones).
Por su parte, la cuenta financiera, excluido el Banco de España, registró entradas netas por valor de 30.275,7 millones de euros, superiores a las entradas netas de 26.938,4 millones del período enero-agosto de 2004. En consecuencia, los activos del Banco de España frente al exterior disminuyeron en 7.201,6 millones de euros, en contraste con el aumento de 7.807 millones de euros registrado en el mismo período de 2004.
Las inversiones directas también en déficit
Las inversiones directas hasta agosto dieron lugar a flujos netos de salida de 8.385,7 millones de euros, por encima de las salidas netas de 8.052,4 millones contabilizadas en mismo período de 2004. Las inversiones directas de España en el exterior registraron salidas de 16.173,1 millones de euros, que superaron ampliamente las entradas de las del exterior en España, que ascendieron a 7.787,4 millones.
Las inversiones de cartera dieron lugar a flujos netos de entrada, por valor de 25.415 millones de euros, por debajo del importe contabilizado en igual período de 2004 (30.838,2 millones). Estas elevadas entradas netas fueron el resultado de las adquisiciones por parte de no residentes de activos emitidos por residentes, significativamente superiores a las compras por residentes de activos emitidos por no residentes (71.665,1 millones frente a 46.250,1 millones de euros).
Por su parte, los flujos netos de salida acumulados por otras inversiones hasta agosto ascendieron a 13.939,5 millones de euros, cifra que multiplica en más de tres veces las entradas netas contabilizadas en idéntico periodo de 2004 (4.127,8 millones). Las otras inversiones de España en el exterior acumularon salidas de 19.883,6 millones de euros, que fueron compensadas en su mayor parte por las entradas del exterior en España, con 33.823,1 millones.