LD (EFE) La Policía de la ciudad iraquí de Mahmudiya, ubicada al sur de la capital de Irak, ha confirmado que al menos treinta personas han muerto y otras 35 resultaron heridas tras estallar un coche-bomba colocado frente al hospital de la localidad que se encuentra en el denominado "triángulo de la muerte", una zona agrícola controlada por tribus suníes entre Bagdad y las provincias chiíes del sur. Fuentes policiales informaron, asimismo, de que otros tres agentes fueron acribillados a balazos por grupos de pistoleros en diferentes puntos de Bagdad, y del hallazgo de los cadáveres de cuatro personas en la zona de Yusifiya, a unos veinte kilómetros al sur de la capital. Se sospecha que las cuatro personas, dos jóvenes y dos mujeres que tenían signos de tortura, trabajaban para las fuerzas estadounidenses destacadas en Irak.
Algunas versiones apuntan a que el coche-bomba estalló al paso por la zona de un convoy militar estadounidense, información que no ha sido confirmada ni desmentida por el mando castrense en Bagdad.
La violencia diaria en Irak también causó también este jueves la muerte de cuatro guardias de seguridad del Ministerio de Industria, quienes fueron tiroteados por un grupo de hombres armados cuando salían de la mezquita Umm Al Tubol, en el oeste de la capital.