Menú

Barcelona es la ciudad más cara para ir al cine y Úbeda (Jaén) la más barata

Una comparación de precios en las entradas de 146 cines detecta diferencias de hasta un 110 por ciento. Barcelona es la ciudad más cara con el doble que Ubeda (Jaén). Según FACUA, una entrada de cine cuesta una media de 5,05 euros a nivel nacional, un 5,2 por ciento más que en 2004. También denuncia la imposición ilegal de consumir exclusivamente productos adquiridos en el interior a precios abusivos.

Una comparación de precios en las entradas de 146 cines detecta diferencias de hasta un 110 por ciento. Barcelona es la ciudad más cara con el doble que Ubeda (Jaén). Según FACUA, una entrada de cine cuesta una media de 5,05 euros a nivel nacional, un 5,2 por ciento más que en 2004. También denuncia la imposición ilegal de consumir exclusivamente productos adquiridos en el interior a precios abusivos.

L D (Agencias) Según el estudio de la Federación de Consumidores en Acción (FACUA), los cines más caros del país son los de Barcelona, que cuestan 6,01 euros de media un día normal y, a continuación, se sitúan los de Madrid, 5,80 euros, Oviedo, 5,77 euros, y Palma de Mallorca, 5,70 euros.

En el lado opuesto figuran Ubeda (Jaén), tres euros, Chiclana de la Frontera, El Puerto de Santa María, La Línea de la Concepción y Rota, todas estas ciudades gaditanas con una media de 3,30 euros por entrada, informó la agencia Efe.

El cine más caro de los 146 encuestados es el Cinesa Maremagnum, de Barcelona, donde la entrada un día normal en sesión de tarde cuesta 6,30 euros. El más barato, el Multicines Ubeda, donde el precio en el mismo horario es de 3,00 euros.

La mayoría de los cines ofrecen precios reducidos para estudiantes y mayores de 65 años o jubilados, mientras que poco más de la tercera parte tiene este tipo de descuento para menores.

Las palomitas más caras 

FACUA también denuncia la imposición ilegal que establecen muchos cines de entrar en las salas exclusivamente con bebidas o alimentos adquiridos en el interior de sus recintos, "cuyos elevados precios llegan a ser, en el caso de los refrescos, hasta cinco veces más caros que en otros establecimientos".

Recomienda por ello a los usuarios afectados que exijan hojas de reclamaciones para denunciar estas irregularidades, ya que la citada imposición es una condición abusiva que vulnera la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios.

Temas

0
comentarios