L D (EFE) En el aeropuerto de Barcelona se han reunido con los representantes de la Asociación de Vecinos de Gavá Mar. Allí han explicado que su problema es similar y que por ese motivo han contactado con ellos para saber las acciones que llevaron a cabo y los contactos que mantuvieron con las administraciones para conseguir minimizar el impacto acústico de su barrio. Así lo explicó Jesús Coca, presidente de la Plataforma contra el ruido y el riesgo de los aviones.
El Ministerio de Fomento aceptó el pasado verano invertir más de 12 millones de euros en la comunicación de las cabeceras de las dos pistas (la principal y la tercera) de El Prat, una obra que permitirá fijar unas rutas de aterrizaje y despegue que minimizarán las molestias a los vecinos.
Los vecinos de Madrid desplegaron una pancarta en la que se podía leer "Ruido de avión = Aena + especulación". Coca aseguró que "el cambio de las rutas de los aviones se debe a un problema de especulación porque antes los aviones pasaban por unas zonas que no se podían recalificar y ahora, al cambiar la configuración, ya sí que se pueden recalificar".
El presidente de la plataforma ciudadana ha explicado que "no podemos dormir, los médicos de la zona están recetando ansiolíticos. Los tapones para los oídos y los ansiolíticos están en las farmacias al lado de las aspirinas porque se han convertido en productos de primera necesidad".
El Ministerio de Fomento aceptó el pasado verano invertir más de 12 millones de euros en la comunicación de las cabeceras de las dos pistas (la principal y la tercera) de El Prat, una obra que permitirá fijar unas rutas de aterrizaje y despegue que minimizarán las molestias a los vecinos.
Los vecinos de Madrid desplegaron una pancarta en la que se podía leer "Ruido de avión = Aena + especulación". Coca aseguró que "el cambio de las rutas de los aviones se debe a un problema de especulación porque antes los aviones pasaban por unas zonas que no se podían recalificar y ahora, al cambiar la configuración, ya sí que se pueden recalificar".
El presidente de la plataforma ciudadana ha explicado que "no podemos dormir, los médicos de la zona están recetando ansiolíticos. Los tapones para los oídos y los ansiolíticos están en las farmacias al lado de las aspirinas porque se han convertido en productos de primera necesidad".