LD (EFE) El juicio especial contra el depuesto dictador iraquí Sadam Husein y siete de sus antiguos colaboradores, se ha reanudado en Bagdad sin la presencia del equipo de abogados defensores. Al entrar en la sala, el ex dictador coreó "abajo los traidores" y "abajo (George) Bush", antes de que el presidente del tribunal, el kurdo Rauf Abderrahman, le pidiera que se sentara.
Los ocho acusados discutieron con Abderrahman, y entre gritos de "Dios es el más grande", "Viva Irak" y "Viva el pueblo iraquí", criticaron la actuación del tribunal y lo calificaron de "ilegal". El ex dictador acuso, además, al tribunal de haberle obligado a asistir a la nueva sesión sin la presencia de los abogados.
Tanto Sadam como su hermanastro, Barzan el Tikriti, se quejaron de que éste último fue "maltratado" y "golpeado" por los guardias del tribunal y exigieron que sea examinado por un equipo médico, lo que ha sido aceptado por el juez. Todos los acusados expresaron que no aceptan a los letrados nombrados por el tribunal para defenderles y exigieron que sus abogados, que boicotean el juicio, vuelvan a acudir a las sesiones del proceso. Esta es la undécima sesión del juicio desde que comenzó la vista del proceso el pasado 19 de octubre.